La 60 Serie Nacional de Béisbol, con arrancada el 12 de septiembre, se efectuará bajo estrictas reglas sanitarias, que incluyen la prohibición de saludos cercanos después de una jugada exitosa o un jonrón, normativas en los medios de transporte, los hoteles y los dugouts, la eliminación del intercambio de alineaciones, el recambio constante de pelotas y las pruebas de PCR para todos los participantes activos en el principal espectáculo deportivo del país.
Estas y otras regulaciones fueron dadas a conocer en el congresillo técnico del evento, desarrollado hoy mediante video conferencia y en el que participaron las principales autoridades deportivas del país y de cada territorio, además de los 16 directores de los equipos participantes.
El congresillo, que se extendió durante tres horas, puso mucho más énfasis en tales medidas que en los aspectos técnicos, aunque estos también fueron abordados.
Para el director nacional director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, el doctor Francisco Durán, invitado especialmente a la reunión, ningún territorio puede creerse libre de la COVID-19, aunque señaló que las provincias con más riesgo son: La Habana, Artemisa, Pinar del Río, Matanzas, Villa Clara, Ciego de Ávila y Las Tunas.
Durán sugirió que las pruebas de PCR que se realizarán a los integrantes de cada escuadra tengan lugar el lunes para ganar tiempo y conocer los resultados para actuar en consecuencia.
“Un jugador que resulte positivo se ingresaría inmediatamente e invalida por varios días al resto del equipo porque es contacto de un grupo de personas y entonces se aplican los protocolos señalados por nuestro sistema de salud, por eso es importante que no exista un mínimo descuido”, enfatizó-
Asimismo, trascendió que los directivos, atletas, árbitros u otras personas vinculadas al evento que violen las medidas establecidas serán sancionados de manera ejemplarizante.
“Queremos que nuestros atletas actúen más por convicción, por cuidarse y cuidar a los demás que por la posible aplicación de un castigo”, expresó otro de los invitados, el ministro de Justicia Oscar Silvera Martínez, quien agregó que la postura de los deportistas influye mucho en el comportamiento de los aficionados.
Los doctores Francisco Montesinos, jefe de la comisión médica nacional de beisbol y Pablo Castillo, director del Instituto de Medicina Deportiva, insistieron en el uso obligatorio del nasobuco para atletas que no se encuentren jugando, algo extensivo a árbitros, trabajadores de los estadios y directivos de las selecciones; la desinfección de guaguas y superficies en los hoteles, la obligatoriedad de lavarse las manos antes de entrar al terreno y la realización de pruebas rápidas cada vez que una selección se vaya a mover a otra provincia.
Ernesto Reynoso, director nacional de béisbol, se refirió a la importancia de agilizar los partidos y de mantener la disciplina dentro y fuera del terreno.
“Seremos rigurosos con las indisciplinas, con los atletas que participen en riñas y sobre todo con aquellos que empleen algún implemento deportivo para agredir”, expuso.
Por otra parte, señaló que no se decretará la victoria por “oscuridad”, teniendo en cuenta las tácticas dilatorias empleadas en el pasado y se ampliará el número de lanzamientos para cada serpentinero en las etapas semifinal y final.
Añadió que se escogerá por votación popular el mejor pelotero de cada semana y que los contratados en Japón solo podrán participar en los choques de pos temporada y nunca reforzando a otra selección ajena a la de su provincia.
Finalmente, Osvaldo Vento, presidente del INDER, exhortó a todos los participantes en la serie a poner el extra para el disfrute del pueblo en tiempos de muchas complejidades, asociadas a la pandemia.
Expresó que el campeonato estará dedicado de manera especial a los 60 años de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) –que llegan a su aniversario el 28 de septiembre- y exigió compromiso, responsabilidad y conciencia.