El Segundo Pleno del Comité de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (Anap) en la provincia cubana de  Granma debatió la influencia de la labor política e ideológica en el cumplimiento de los indicadores productivos en el 2015 y la marcha de la contratación correspondiente al 2016.

El análisis enfatizó en el insuficiente trabajo de la organización que se refleja en los bajos rendimientos agrícolas en los granos, café, tabaco, caña de azúcar; la no aplicación de la ciencia y la técnica e incumplimientos de los programas de siembra, atenciones culturales a las plantaciones y cosecha.

También reconoció la deficiente atención a los productores, la no explotación de las áreas disponibles, por parte de algunos campesinos, y las ventas a destinos no previstos.

Sobre el proceso actual de la contratación se aseguró una mayor preparación y organización en las juntas directivas y precisión en las cifras demandadas por el encargo estatal y compromiso de los asociados.

El pleno evaluó, además, el estado de cumplimiento de las acciones hasta la fecha y la implementación de los objetivos del XI Congreso de la Anap celebrado en mayo último.

Carlos Arias Pérez, miembro del Buró ejecutivo del Partido en Granma, significó que es un reto grande el que tienen los cooperativistas para lograr asegurar el crecimiento económico, la alimentación del pueblo y hacerlo con eficiencia.