Manzanillo.- El Che escribió en su diario sobre Carlos Coello, el Tuma de la guerrilla de Bolivia: “Con él se me fue un compañero inseparable de los últimos años, de una fidelidad a toda prueba y cuya ausencia siento desde ahora casi como la de un hijo”.
Similar sentimiento experimenta hoy el pueblo de esta costera localidad, al evocar la figura del legendario combatiente justo en el día del aniversario 50 de su caída en lucha como parte de la guerrilla del Che en aquella nación andina.
Carlos Coello nació en la finca La Caridad, en las cercanías de Manzanillo, el 2 de diciembre de 1940. En 1956 se unió al Movimiento 26 de Julio, se incorporó al Ejército Rebelde, en la Sierra Maestra, antes de cumplir los 17 años -en noviembre de 1957-, siendo un campesino casi analfabeto.
Estuvo bajo las órdenes del Che desde los primeros momentos, participó en numerosos combates y tomó parte en la invasión y la Campaña de las Villas, como integrante de la Columna 8 Ciro Redondo.
Al triunfo de la Revolución cubana, pasó a formar parte de la escolta del Comandante Guevara, bajo las órdenes de Harry Villegas.
Combatió también en la guerrilla de El Congo, y ostentaba el grado de teniente.
Hermano de el Tuma, el campesino Pedro Coello Bring, quien se desempeña como presidente de una base productiva manzanillera, dijo que la muerte de Carlos no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida, legado que encuentra reflejo hoy en la consolidación de las conquistas cubanas y el avance social de la república plurinacional de Bolivia.
“Esa obra evidencia las condiciones y cualidades revolucionarias, el amor a la Patria y el cariño que sentía mi hermano hacia Fidel, Raúl y el Che; su vida y trayectoria permanecerán siempre en el corazón de quienes lo honramos hoy”, aseveró Coello Bring.
En la secundaria básica Carlos Coello se forman adolescentes que residen en el populoso barrio manzanillero de Caymari, los que junto a representantes de las organizaciones políticas y de masas del este costero municipio y lugareños acudieron a la ceremonia, que encabezaron Federico Hernández Hernández y Manuel Sobrino Martínez, principales autoridades políticas y gubernamentales granmeses, respectivamente.
Momentos de particulares emociones fueron los dedicados a entregar a 20 jóvenes destacados de diferentes sectores laborales el carné que los acredita como militantes de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).
El primer secretario de esa organización en la oriental provincia cubana de Granma, Gelquis Ricardo del Toro Pérez, aseguró en las palabras centrales de la actividad que el ejemplo de valentía y determinación patriótica y revolucionaria de Carlos Coello guían hoy las misiones de las nuevas generaciones de cubanos.
“Tuma es presencia permanente entre los bisoños granmenses que defendemos lo nuestro sin dejarnos llevar por los cantos de sirenas del imperio. Lo vemos en los agradecidos, que cerramos filas político-ideológicas y alzamos las voces para repudiar las más recientes declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump.
“Coello está en todas partes convertido en gigante: su ejemplo e ideas abonan el trabajo y protagonismo para que la provincia de Granma triunfe y avance indetenible, con la convicción de que de nuestro esfuerzo personal dependerán las victorias”, cerró el dirigente juvenil.