Con estirpe de mambisa esta mujer bayamesa le tocó muy de cerca la Covid 19. Yanelis Diana Aguilera Serrano se desempeña como Secretaria Docente e imparte clases de Química en el Instituto Preuniversitario de Ciencias Exactas (IPVCE) “Silberto Álvarez Aroche”, centro educativo de la provincia Granma, fundado el 19 de diciembre de 1986, por el líder histórico de la revolución cubana Fidel Castro Ruz y que hoy funciona como centro de aislamiento para pacientes que son contactos directos de casos positivos al SarCov-2.

-¿Cómo llegas al centro de aislamiento, por designación o por voluntad propia?

“Fue una decisión personal, luego de escuchar una convocatoria del director del centro para el cumplimiento de esta importante tarea. No dudé un minuto y dije que podían contar conmigo”.

-¿Qué actividad específicamente te tocó hacer allí?

“Mi labor consistió en la higienización de vasijas utilizadas por paciente contactos directos con positivos a la Covid-19”.

-¿Qué significado tuvo para Yanelis trabajar en el centro de aislamiento. ¿No sentiste miedo?

“Trabajar por 14 días consecutivos en esta tarea tuvo un gran significado para mí, pues experimenté una satisfacción muy grande contribuyendo al cuidado de estos personas que aguardaban la espera de una noticias mala o buena y eso es muy estresante.

Resulta gratificante cuando le daban el alta médica a un grupo y se despedían agradeciendo la atención recibida. Momentos también de tristeza por ver como trasladaban a otros al hospital porque el resultado de su PCR fue positivo y más cuando son niños que algunos tenían que marcharse solos sin sus familiares.

Eso es realmente triste. Yo sentía mucha nostalgia por estar lejos de mi familia y sí el temor nunca se va, siempre sientes ese miedo de poder enfermar porque a pesar de cumplir con todas las medidas y usar los medios de protección, sabemos que estamos manipulando objetos que pueden portar ese virus invisible que está causando tanto daño a la humanidad.

“El día que ya terminábamos nuestra labor allí, esos mismos pacientes a quienes atendimos se asomaron por las ventanas dando las gracias por las atenciones y gritando nuestros nombres, es algo que emociona, a mí en particular, me brotaron las lágrimas”.

Aguilera Serrano junto a Darling, Marelis, José Manuel, Carlos Javier, Rubislandi, David, Ricardo, José Salvador y Edel fueron los integrantes de la primera brigada que laboró en zona roja en este centro educativo de la provincia de Granma y no precisamente impartiendo conocimientos a estudiantes, esta vez el compromiso era mayor.

-¿Qué papel les corresponde a los preceptores cubanos en tiempos de pandemia?

“Los educadores juegan un papel fundamental pues están en la primera línea de combate incondicionalmente y los que por diversas razones no pueden estar en zona roja se dedican a la higienización de las escuelas, custodian los recursos y por las redes sociales brindan atención a los estudiantes mediante la publicación de hojas de trabajo, autoexámenes. Siempre estaremos donde la revolución nos necesite”.

Muchos son los educadores granmenses que como Yanelis, hoy se suman a la lucha contra la Covid 19, héroes anónimos que mantienen en alto el precepto martiano de que “Patria es Humanidad”. ¡Esos son nuestros valientes! Para ellos nuestro agradecimiento eterno.