Como parte de las acciones arbitrarias de ciudadanos que no responden a las autoridades legítimas de Venezuela, el pasado lunes tuvo lugar una ocupación forzosa de espacios diplomáticos de Caracas ubicados en Estados Unidos, acto denunciado por el gobierno bolivariano.
La cancillería venezolana aseguró que las personas que irrumpieron las sedes responden a los intereses políticos de Washington, y violentan lo establecido en la Carta de Naciones Unidas, donde se exige el respeto a la soberanía y autodeterminación de las naciones.
Ante los hechos, el comunicado emitido por Arreaza exige a la Casa Blanca cumplir con sus obligaciones de derecho y tomar las medidas necesarias para revertir de manera inmediata dicha ocupación forzosa. Igualmente, solicitaron actuar ‘en cumplimento de lo previsto en los artículos 22 y 45 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, acerca de la obligación de proteger las sedes diplomáticas, incluso en caso de ruptura de las relaciones, como de hecho lo hace Venezuela en referencia a la antigua sede de la embajada estadounidense en Caracas’.