Caracas, – Mientras sectores de la derecha venezolana convocan nuevas acciones para presionar al Consejo Nacional Electoral (CNE) para acelerar el revocatorio, el Gobierno persiste hoy en su llamado a la paz y a dirimir las diferencias mediante el diálogo.
La más reciente convocatoria la hizo el vicepresidente ejecutivo, Aristóbulo Istúriz, pues “siempre es posible un entendimiento, lo más importante es que se haga a tiempo”.

A su entender, la derecha venezolana está pendiente de otros temas que no son relevantes para el pueblo y no resuelven el problema económico ni el alimentario.

En una entrevista concedida al diario El Universal, destacó la necesidad de entablar un diálogo como vía para solucionar todos juntos los problemas del país.

Todavía hay tiempo en Venezuela para hablar y resolver las diferencias entre el Gobierno Nacional y la oposición, consideró.

En reiteradas oportunidades el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha convocando al sector opositor a una mesa de entendimiento, pero la derecha se enfoca en otros asuntos menos relevantes y busca sabotear al Gobierno: ese es el problema, consideró.

Mientras tanto -añadió- el ejecutivo potencia los planes dirigidos a garantizar el bienestar del pueblo, acabar con la guerra económica, la especulación y el modelo rentista petrolero.

Istúriz acotó que la nueva agenda de la derecha para las próximas semanas será contrarrestada con actividades permanentes de calle con el Partido Socialista Unido de Venezuela a la cabeza.

Por su parte, el Defensor del Pueblo Tarek William Saab destacó la voluntad de paz de los venezolanos, tras las movilizaciones del jueves 1 de septiembre en varios puntos de la capital convocadas por el Gobierno y también por la oposición.

El funcionario aseguró que en las manifestaciones de ambos sectores políticos se impuso la conciencia democrática del pueblo.

También reconoció que al final de la jornada un grupo pequeño de la oposición creó focos de violencia en sectores periféricos de la capital, pero a pesar de ello reinó el civismo en la nación.

La canciller venezolana, Delcy Rodríguez, también ha reiterado en varias ocasiones la disposición del ejecutivo de entablar un diálogo con sectores de la oposición, en aras de consolidar la paz e impulsar la economía nacional.

Pero la Mesa de la Unidad Democrática insiste en presionar al CNE para que acelere los plazos del revocatorio, pese a los llamados de esa entidad a respetar los tiempos establecidos.

El secretario ejecutivo de esa coalición opositora, Jesús Torrealba, anunció que el 7 de septiembre se apostarán frente a las sedes del organismo electoral para exigir la realización del revocatorio en 2016.

Según el CNE, los mismos que ahora reclaman acelerar el proceso revocatorio fueron los responsables de retrasarlo al incumplir con los plazos establecidos en la entrega de documentos. Más tarde, se detectaron irregularidades y fraudes en la recogida de firmas.