Beijing, – El presidente Xi Jinping planteó hoy afianzar la confianza política y la cooperación económica entre China y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), al asegurar que el bloque es prioridad en la diplomacia de su país.
Destacó el apoyo y solidaridad recíproca mostrada desde el comienzo de la pandemia de Covid-19, mientras llamó a cumplir con los protocolos necesarios para contener la enfermedad y dar paso al movimiento de personas y bienes.
De acuerdo con Xi, China ve en la Asean una pieza clave en la implementación del proyecto de la Franja y la Ruta, y desea trabajar juntas con el objetivo de acelerar el progreso y la prosperidad de todos los territorios implicados.
Abogó por coordinar más los planes de desarrollo, prometió crear otro corredor terrestre-marítimo para el comercio internacional, ampliar las obras de infraestructuras y elevar la asociación estratégica a un nivel superior.
China –precisó- trabajará con los países de la Asean para mantener un flujo mercantil fluido, promover la inversión mutua, abrir mercados y fomentar cadenas bien integradas en materia de industria, suministro y valor.
Sugirió explorar terrenos como la construcción de ciudades inteligentes, la red 5G, inteligencia artificial, comercio electrónico, macrodatos, cadena de bloques y telemedicina, así como fortalecer la seguridad cibernética.
Por otro lado, Xi Jinping sugirió mejorar el diálogo sobre la salud pública, compartir información y diseñar planes de producción, desarrollo y distribución de vacunas.
Aseguró que China considerará las necesidades de los países de la Asociación cuando sus medicamentos contra la Covid-19 estén listos para usarse, brindará apoyo financiero, capacitará a mil trabajadores sanitarios e instaurará un mecanismo de enlace para atender emergencias en el sector.
Asimismo, reiteró la continuidad aquí de la política de puertas abiertas aunque el gigante asiático adoptará un patrón de crecimiento que concede mayor peso a la autosuficiencia en la innovación científico-tecnológica y al consumo doméstico, este último posicionado desde hace años como el principal catalizador del Producto Interno Bruto.