Optimistas andan los caficultores de Buey Arriba, con el buen ritmo que exhibe la actual zafra. Allí, no debe haber problemas para entregar las 125 toneladas previstas, el 20 de diciembre próximo.

Así, lo anunció Nelson Guevara Beltrán, director de la Unidad empresarial de base de acopio y beneficio del café en ese serrano municipio de Granma, quien explicó que ya sobrepasan el 50 por ciento del café arábico planificado, y han despulpado más del 90.

“También, preparamos las condiciones para comenzar el proceso de molinación y venta, el primero de noviembre, y para ello contamos con toda la materia prima necesaria”, argumentó.

Con relación a la contienda anterior, Guevara Beltrán reveló que están en una situación favorable: “Se montaron tres despulpadoras de mano (en Ramírez, Limoncito y en Las yaguitas), lo que permitió un ahorro considerable de combustible, antes había que transportarlo diariamente a centros de beneficio.

“Con estas medidas, lo sacamos cada cuatro días y se incrementa la calidad. Otra de las acciones es no mantener volúmenes grandes en las montañas: ir acopiándolo poco a poco, para conservarlo, protegerlo y darle un correcto beneficio”, agregó Nelson.

De esta manera, también preparan el café que necesitan para el mercado internacional y el consumo nacional, “aunque no exportamos directamente, si entregamos materia prima”, puntualizó.

Quizá, lo que más llame la atención en esos intrincados parajes de la geografía granmense, es el ambiente favorable y entusiasta que reina entre los productores.

“Se incrementó el precio del kilogramo (antes era por lata), una lata de café se vendía a 50 pesos aproximadamente, y hoy lo triplica, eso ha incentivado que no se pierda ni un grano. Hay pobladores que tienen un patio sembrado y lo entregan. Está saliendo un buen nivel de café”, concluyó.