
Como los legendarios mosqueteros de Alejandro Dumas, en Cuba estamos alertas y unidos ante el coronavirus, esa suerte de peste infernal , tanto por la forma de contagio como por su letalidad.
En el Ministerio de Salud Pública no se descansa, hasta el momento, datos del 15 de marzo último revelan que se encuentran ingresadas para vigilancia epidemiológica 259 personas, de ellas 90 extranjeros y 169 cubanos.
Esto no es reciente desde el 25 de enero último 272 pacientes fueron hospitalizados y se le ha dado seguimiento en la atención primaria de salud a 15 mil 793 personas.
Pero hay más para el Covid 19 se han estudiado 51 pacientes, con cuatro positivos, fueron habilitadas mil 442 camas en 11 hospitales y 867 en centros de aislamiento ; para el traslado de pacientes sospechosos o confirmados están listas 175 ambulancias con tripulaciones entrenadas.
Como los cubanos esperábamos, de manera responsable y documentada, en cuanto los exhaustivos exámenes no dejaron margen a la duda, el Ministerio de Salud Pública, informó sobre la confirmación de los tres primeros casos de coronavirus en el país, todos importados, poco después lo haría con el cuarto.
Todos se encuentran ingresados y aislados en el prestigioso Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, evolucionan favorablemente y ninguno, hasta el momento, presenta peligro para su vida.
Como hechos destacables las personas identificadas como “contactos” son vigiladas epidemiológicamente, pero hasta el momento no presentaban síntomas, en el proceso se cumplió todo el protocolo definido.
La participación popular fue sumamente importante para la localización y tratamiento de los infectados, esa es otra fortaleza del sistema de Salud cubano además de la profesionalidad: históricamente la población ha colaborado de manera entusiasta y efectiva para preservar esa conquista fundamental.
Vuelve aquí a cumplirse el lema de los espadachines de Alejandro Dumas: todos para uno.
Desde el propio surgimiento este “super virus”, la Mayor de las Antillas toma las medidas para prepararse y enfrentar a la ya declarada pandemia inducida por la aparición del nuevo coronavirus, presente en más de 100 países en la actualidad y ha provocado un descomunal número de enfermos y fallecidos.
Otra fortaleza criolla son las audiencias sanitarias que en cada barrio, empresa y ministerio pormenoriza de modo interactivo todo lo referente al nuevo coronavirus y sienta las pautas para mitigar o eliminar su efecto.
¡Atención! esta enfermedad ha sido también motivo de manipulación en las redes sociales y agencias vinculadas a las trasnacionales de la información mediante la falsedad de que Cuba “escondería” resultados de los análisis; esta declaración del Ministerio de Salud Pública desbarata todas esas intrigas, los propaladores de rumores (no esconden su odio) se cogieron la cola con la puerta pues la verdad nos asiste.
Recordemos: las manipulaciones en torno al virus pasan por una verdadera campaña fanática contra todo lo que oliera a China , país en pos de revertir la situación, y aunque les pese a los mentirosos, también con la contribución de medicamentos cubanos, pero claro, ello no aparece en los grandes medios informativos.
Se evidencia una vez más que con modestia, profesionalidad y apoyo popular Cuba y sus hijos afrontan la pandemia y hacen todo lo posible para menguar sus efectos.