
La Habana, – El reciente incendio del campo de migrantes de Moria, en la isla griega de Lesbos, reavivó la llama del debate en Europa sobre la política de asilo y migración, considerada un completo fracaso por analistas, instituciones y numerosas organizaciones.
Tras quedar sin techo y tener como única solución realojarse en campamentos temporales en la misma isla, miles de indocumentados se lanzaron a protestar para reclamar la evacuación a territorio continental, con la esperanza de dinamizar al fin los procesos de regularización migratoria.
Desde varios países de la región se multiplicaron las muestras de apoyo, como en Alemania, donde miles de personas salieron a las calles para denunciar la pésima situación de los migrantes en Lesbos.
Los participantes enarbolaron pancartas con consignas como ‘Tenemos espacio’ o ‘Dejen entrar a la gente’.
Diversos movimientos ciudadanos abogaron en los últimos días por acciones concretas, pero las iniciativas escasean y solo unas pocas naciones se han brindado para acoger a quienes se encuentran atrapados en Lesbos y en otras islas griegas.
La jefa de la organización Oxfam para la Unión Europea, Marissa Ryan, aseveró que lo sucedido en Moria evidencia el fallo de la región en la materia.
Esta semana la Comisión Europea (CE) presentó un nuevo pacto sobre asilo y migración encaminado a establecer un mecanismo de solidaridad obligatorio entre los países del grupo comunitario, con el objetivo de propiciar una mejor gestión del tema.
Al respecto, Ryan sostuvo que, si la CE quiere mejorar el sistema, debería también demostrar la resolución necesaria para garantizar que todos los Estados miembros del bloque respeten los Derechos Humanos y la dignidad de las personas.