
Desde que hace dos días se publicaran las listas del Todos Estrellas ofensivo y defensivo de la 60 Serie Nacional de Béisbol (SNB) varios aficionados han reaccionado heridos o con disgusto, por la ausencia de granmenses en esa relación.
Resido en el territorio de los Alazanes, pero prefiero escribir desde el análisis y no desde la pasión mostrada por algunos en las redes sociales. ¿Es un disparate la no inclusión de atletas de esta provincia en la selecta selección? Tal vez. Pero no deberíamos pensar es que es una emboscada, un atentado o una conspiración.
Mucho menos deberíamos esgrimir las razones que han planteado algunos: Granma fue junto a Sancti Spíritus el equipo que más partidos ganó en la etapa regular, llegó al play off final y algunos de sus peloteros –como Lázaro Blanco- son hipotéticamente los mejores en su posición.
Al final –incluso en el principio- ninguno de esos argumentos derriba de inmediato a los peloteros escogidos. Y no suscribo con esa idea que no se cometieran injusticias con atletas de esta u otra selección.
Si analizamos la ofensiva nos percataremos de que era casi imposible votar por un integrante de los Alazanes . Tanto Guillermo Avilés, en primera base, como Raico Santos en los jardines -los dos de más posibilidades- estuvieron por debajo de Lisbán Correa (seleccionado el MVP) y Yasniel González, quienes fueron los escogidos.
Pero si nos detenemos en el renglón defensivo sí encontramos algo llamativo: el tunero Dailer Peña fue tenido en cuenta primero que Raico Santos. Y el granmense sí fue superior a su vecino. Ambos cometieron un error y jugaron en los tres jardines, pero los dos defendieron más el left field. Raico participó en 18 partidos más (68 por 50), tuvo 41 lances más (141 por 101) y terminó con 993, dos puntos por encima de Peña.
Tal vez Raico haya sido “medido” como patrullero derecho, posición en la que otro tunero, Andrés Quiala promedió 1 000.
Otro con posibilidades de ser escogido en el Todos Estrellas defensivo era Carlos Benítez, atendiendo a que solo cometió cinco errores y promedió para 985, superior a César Prieto (ocho errores y 983). No obstante, vale señalar que César jugó 12 partidos más (74 por 62) y participó en 22 doble plays más (90 por 68). “Habría que ver…”, como suelen decir en los campos de Cuba.
En las redes sociales, varios partidarios de Granma también han abogado por la inclusión de Lázaro Blanco. Pero olvidan que él marchó a Nicaragua y que el escogido, Frank Madan, fue líder en victorias (13), y ponches (109) y séptimo en promedio de carreras limpias (PCL). Debe ser que tienen en la mente las actuaciones espectaculares del derecho de Yara en los play off, pero esta selección corresponde a la etapa regular y Blanco no reunió las entradas requeridas (62,2), de lo contrario hubiese sido líder en PCL (2,01) y en promedio de ganados y perdidos (875; es decir, siete victorias y un solo fracaso). No tengo dudas de que si los Alazanes triunfaran sería electo el MVP de la postemporada.
En todo caso, no creo que estas exclusiones afecten a los Caballos, como han sugerido algunos de cara a los play off con Matanzas. Y las supuestas heridas muchas veces impulsan en el terreno. A partir de este domingo 28 veremos qué sucede.