Desde su fundación un 30 de diciembre de 1960, por el Comandante Fidel Castro, el Instituto cubano de amistad con los pueblos (Icap), ha liderado importantes luchas en defensa de numerosas causas justas de Cuba y el mundo.
Así lo enfatiza Ezequiel Morales Morales, funcionario político del Icap en la oriental provincia cubana de Granma.
“Los objetivos fundacionales del Icap difieren mucho de los actuales. En aquellos momentos estaba la naciente revolución cubana, y era necesario darle a conocer al mundo qué era Cuba, y qué había logrado con la victoria del Primero de enero de 1959.

“El objetivo era que los amigos que vinieran de diferentes países del mundo vieran los avances de la Revolución. Desde su fundación el Icap ha pasado por cuatro etapas fundamentales: primero una etapa institucional, que a decir de Sergio corrieri, tenía la misión de hacer amigos.
“En esa etapa fundacional los funcionarios del Icap se ocupaban de organizar actos como el Primero de Mayo, el 26 de Julio, o sea, que funcionaban como un apoyo al Ministerio de Relaciones Exteriores, en mi opinión”, añade Morales Morales.
Con el tiempo fueron acrecentándose las agresiones políticas, ideológicas en contra de Cuba y era necesario empezar a fundar organizaciones o grupos amigos de Cuba, y todos los gobiernos progresistas empezaron a apoyar al Icap y a las organizaciones hermanas en diferentes países para contribuir con la solidaridad con Cuba.
“Llegó una segunda etapa, que yo diría fue la derechización del campo socialista, ya esos gobiernos no apoyaban desde el punto de vista monetario las organizaciones de solidaridad y fue necesario que nosotros redimensionáramos nuestro trabajo efectuando actividades que además de tener un contenido político y de tratamiento a los amigos, pudiéramos autofinanciarnos.
“Se crea entonces la Agencia Amistur, que es la agencia de viajes de Cuba; el campamento internacional Julio Antonio Mella, que si bien antes era para alojar a las brigadas, adquiere un carácter solidario y comercial, porque las brigadas pagan todos sus gastos, sencillamente vienen por solidaridad.”
Durante la tercera etapa el Icap tramitó donaciones a la Isla, proyectos de beneficio social, y posteriormente le fueron asignadas algunas batallas a desarrollar: la lucha por el regreso del niño Elián González y posteriormente en el regreso de los Cinco Héroes.
“En lo particular considero que nuestro mayor logro ha sido el regreso de los cinco luchadores antiterroristas a la Patria, para lo cual se crearon Comités de solidaridad en diferentes países y en sectores de la sociedad cubana. Fue un triunfo de todos.
“Después se nos asignó la liberación del puertorriqueño Oscar López Rivera, que llevaba 36 años preso; la liberación de Luis Ignacio Lula Da Silva y en estos momentos estamos enfrascados en la lucha de todas las causas justas, entre ellas la lucha constante por el levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a la isla, la devolución del territorio ilegalmente ocupado en Guantánamo, la lucha por la integración latinoamericana y seguir contribuyendo a la amistad y solidaridad de Cuba con los países del mundo”, enfatiza Ezequiel Morales.
EL Icap en Granma tiene un fuerte hermanamiento con la región de la Liguria, Italia, pero sostiene relaciones con más de dos mil organizaciones en 175 países del mundo.