Cuarenta y cinco años de obra honorable

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Por Roberto Mesa Matos | 8 noviembre, 2021 |
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FOTO/ Roberto Mesa

Manzanillo.- Céspedes y Fidel en el recuerdo permante, la campana, el jagüey y las ruinas del ingenio Demajagua como testigos silencios de los desafíos y el compromiso del pueblo de las pujantes cinco provincias del Oriente rebelde e invicto

Domingo lluvioso como hace 45 años atrás, cuando el Líder Histórico de la Revolución llegó al Altar de la Patria para multiplicar la región y que los orientales avanzaran.

El historiador Aldo Daniel Naranjo, presidente esbozó cada propuesta que en aquel instante sustentó el Líder Histórico de la Revolución cubana para respaldar la necesidad de la nueva división política – administrativa, “en busca de la solidez del desempeño de los órganos locales del #PoderPopular.

“Pedro García Lupiañez asumió como primer presidente de Granma, hombre con una brillante hoja de servicios, desde las luchas estudiantiles contra la tiranía de Batista.

Naranjo definió que “el granmense es un ser sencillo, cordial, humanista, muy unitario, amante de sus tradiciones y su identidad.

“Granma y su historia son el mejor ejemplo de cómo un pueblo enfrenta los obstáculos con decisión y audacia para salir vencedores, porque ama la vida y defiende la #Patria.”

Los miembros del Comité Central del Partido Jorge Luis Broche Lorenzo, integrante del Secretariado y jefe del departamento de la esfera social y Federico Hernández Hernández, máximo dirigente político, aplaudieron el estímulo a quienes en estos calendarios se entregaron a la obra hermosa y honorable: Manuel Sobrino Martínez, ministro de la Industria Alimentaria; Rafael Onay Domínguez Fernández y José Antonino Leyva García, quienes en su momento fueron presidentes del Gobierno en esta provincia.

En las palabras centrales del acto, Francisco Escribano Cruz, gobernador granmense refirió que estos 45 años son “hermosas y honorables páginas de amor, entrega y sacrificio en las cinco provincias.

“El Poder Popular es la mayor conquista de Fidel y la Revolución por eso tenemos la misión de seguir defendiendo el concepto y perfeccionarlo con el trabajo diario.

“Desde aquí abrazamos a los granmenses y rendimos sentido tributo a los que contribuyeron a engrandecer la obra, particularmente a los que como ustedes, asumen el deber de representar los genuinos intereses del pueblo.

“Creciente son las metas y prioridades, sobre todo afianzarnos en las transformaciones de nuestras comunidades, poniéndole corazón al barrio, a Cuba.

“Nuestra Revolución nació de una pequeña semilla, que hoy se ha convertido en gigantesco árbol, sueño secular que transformó en hermosa realidad de hoy la voluntad del pueblo, convertida ya en un pedazo irreversible de la historia”, concluyó el dirigente.

Céspedes y Fidel como inspiración y guías. En el camino la determinación del pueblo de las cinco provincias orientales de trabajar y vencer siempre.

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