
No podemos precisar cómo el Ylang ylang, cananga adorata como nombre científico, o comúnmente conocida como flor de flores, se adaptó al entorno de Media Luna, ese sitio granmense acodado en la costa y distinguido por sus casas de maderas envejecidas.
En honor a la verdad, nunca antes se había escuchado mucho sobre su existencia, hasta que aquellas plantas de origen filipino, con flores amarillas, de aroma suave que acaricia, se introdujeron en el municipio para insertarse en la cartera del territorio de cara a las exportaciones.
Desde entonces, la gente de allá empezó a descubrirle sus misterios, a pesar de su establecido posicionamiento en el mundo de la cosmética y la perfumería (es el principal componente del famoso chanel número 5), y en la medicina natural (ideal en la aromaterapia), por las elevadas propiedades del aceite esencial que de esta se extrae.
Mas, lo importante y novedoso aquí, es que ya acciona en la localidad, puntualmente en la comunidad Colorao, una planta de extracción del aceite de marras.

La procesadora, a cargo del grupo empresarial LABIOFAM, concebida en un contrato de exportación con ROBERTET, firma francesa dedicada a la producción y comercialización de perfumes y esencias, y presumiblemente pionera en la región de Latinoamérica, ha llegado para corroborar que hay aquí, como en todos los territorios cubanos, infinitos tesoros por aprovechar, en aras de dinamizar la economía, y por consiguiente nuestro panorama social.
DISYUNTIVA
Descubrir y aprovechar ese caudal en toda su extensión, es uno de los grandes retos que enfrentamos hoy, frente a una crisis económica mundial con impacto serio en nuestros procesos productivos y de servicios.
Hay muchas razones para exportar, como aprovechar ventajas comparativas y las oportunidades de mercados ampliados a través de acuerdos preferenciales, la necesidad de involucrarse en el mercado mundial y buscar en este, mayor rentabilidad.
Pero hay una fundamental, es imprescindible exportar para poder importar, para generar las divisas necesarias para comprar afuera sencillamente lo que no tenemos dentro. Ninguna economía se considera fuera de tal requerimiento
Y, mientras se aumentan paulatinamente las exportaciones, existe la alternativa a corto y mediano plazo de reemplazar importaciones. En ambos caminos tenemos mucho por hacer.
RECORRIDO
Como se ha informado, el pasado año la provincia controló 41 rubros exportables, en siete organismos y 27 entidades, y captó valores superiores a los 464 millones de pesos, poco más de 300 millones por encima de la etapa precedente, aunque ese crecimiento se asocia a un alza de precios.
El mapa de exportaciones cerró la etapa con 74 rubros y atributos, de estos 10 en fomento, 14 en desarrollo y 50 en consolidación, mientras se inició la incursión en cinco rubros, con destaque para la angula, de la cual se exportaron 212 kilogramos, por un valor superior a los 690 mil USD, equivalente a 20,1 millones de pesos cubanos.
El anterior financiamiento le ha permitido a la Empresa PESCAGRAM, avanzar en la disponibilidad de piensos, motores, neumáticos, para desarrollar el cultivo de la tilapia en más de ocho hectáreas, porque exportar se traduce en progreso no solo para el país y el territorio, sino también para las propias entidades exportadoras y sus colectivos de trabajadores.
Se avanzó en la obtención de liquidez por parte de las entidades, las cuales solo solo por ventas internas en divisa, igualmente importantes, han generado más de siete millones de MLC, con destaque para las ventas online y en las tiendas recaudadoras de divisas, y para las empresas de la industria alimenticia y la agricultura, aunque mucho más hay que proponerse y hacer.

Las formas de gestión no estatal han materializado más de 200 contratos, entre estos, 12 exportaciones, y en este universo habrás ascensos significativos en correspondencia con la respuesta de la provincia en la creación de micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) y las aperturas diseñadas por el país para esos nuevos actores.

DESAFÍOS
En reciente intervención sobre la actividad, Prisciliano Guisado Tapia, al frente del Departamento del Comercio Exterior en Granma, reiteró la misión de ingresar por las tres vías que están aprobadas, la moneda que a este país le hace falta para su desarrollo, camino ineludible ante tantas necesidades y posibilidades
Recordó que muchas trabas que antes frenaban este proceso, ya no existen, y sí muchas bondades para desarrollar las entidades y aliviar las situaciones y problemas que en lo social tenemos.
“Disponemos de tres canales fundamentales por los cuales podemos ingresar, una las exportaciones, que es con lo que más moneda fresca y más rápido entra al país, pero debemos aprender qué cosa es vender y qué cosa es exportar, pues son dos conceptos distintos.
“Hoy lo que más hacemos es vender, exportar requiere de otros atributos que no todos los productos tienen, como sostenibilidad en el mercado, y calidad, de todo lo cual estamos muy lejos.
En ese sentido, señaló como importante y a manera de ejemplo de cómo debe hacerse, el sector agrícola debe diferenciar cuáles son las áreas destinadas a la exportación, y lograr certificación de la calidad desde que nace el producto; eso es algo que nos va a ser crecer, tanto como en las industrias cumplir con las normas de inocuidad, un elemento básico incluso para las producciones con destino al mercado interno.
Nuevamente se reitera lo referente a la certificación de productos y procesos productivos, una gestión en la cual Granma fue de avanzada muchos años atrás, y a pesar de contar con especialistas de experiencia, no logra reanudar un trabajo responsable al respecto.
De acuerdo con Guisado Tapia, otra vía de ingreso son los proyectos de colaboración internacional, con dos direcciones, Cuba recibe y Cuba ofrece (colaboraciones), y en torno a los cuales la provincia maneja más de 80 millones de dólares.
Los acueductos de Bayamo y Guisa, y la planta bayamesa para el procesamiento de granos, son resultado de los mismos, en tanto se abrirá próximamente en la serrana localidad de Bartolomé Masó, uno vinculado con la producción de café, con financiamiento de alrededor de 40 millones de pesos y beneficio para unas 60 cooperativas.
“Esos proyectos, significó Prisciliano, pueden transformar los barrios donde se ejecutarán, porque en los términos de referencia se pueden incluir aspectos sociales; eso hay que aprenderlo a defender, porque no siempre los recursos que entran por proyectos han tenido el mejor destino.”
La tercera vía es la inversión extranjera, con 24 proyectos hoy en la cartera de oportunidades, tres de ellos patrocinados por el gobierno de la provincia, aunque, reconoció el directivo, falta agilidad en las entidades para hacer los estudios de factibilidad necesarios para atraer inversión foránea.
“Para poder avanzar, aseguró Guisado Tapia, posibilidades sí tenemos, falta poner más inteligencia y capacitación.”
Pies de fotos
-Con unos 90 kilogramos de flores la planta medialunera puede obtener hasta 450 gramos del aceite del Ylang ylang
-Prisciliano Guisado Tapia: “Tenemos posibilidades para poder avanzar”
-Entre los nuevos actores económicos cobra fuerza la producción de carbón para la exportación