
El bolero, género musical romántico, cadencioso, suave y conmovedor, constituye uno de los grandes aportes nacionales a la cultura universal, desde su inicio a mediados del siglo XIX.
Muchos fueron sus cultores: Trío Matamoros, Bola de Nieve, Antonio Machín, Beny Moré, César Portillo de la Luz, José Antonio Méndez, Elena Burke, Beatriz Márquez, Omara Portuondo, Lino Borges, Mundito González…
Inspirado en la sonoridad de los grandes intérpretes, el riocautense Eugenio Núñez López, bolerista casi desde que nació aquel 18 de junio de 1948, le aportó su sello personal.
SABOR A MÍ
“Siempre me interesó el canto, por esa razón, desde la etapa primaria de mis estudios incursioné en mis primeras actuaciones.
“En el año 1961 integré el movimiento de artistas aficionados con los grupos locales Ritmo de azúcar y Juvenil, con los que promocionaba la música cubana en diversas actividades comunitarias.
“Cantaba de todo, preferiblemente boleros. Aprovechando mis condiciones vocales formé parte del Coro profesional de Bayamo, como Primer tenor, desde 1986 hasta 1986 participando en diversos conciertos dentro y fuera de la provincia.
“Por diversas razones retorné a Río Cauto y como la visión no me acompañaba, me incorporé a la Asociación Nacional de Ciegos y Débiles Visuales (ANCI).
Quería continuar cantando y como la asociación también desarrolla las diversas manifestaciones artísticas entre sus miembros, la representé en eventos y festivales del bolero, de la ANCI, alcanzando once premios provinciales, cuatro nacionales y otros en diferentes concursos .
“Considerando mi desempeño como bolerista, la Casa de cultura Nicolás Guillén, también me agasajó con reconocimientos por mi contribución artística en ferias, jornadas culturales, espacios sistemáticos de la institución, carnavales y otras acciones”.
ADORO
“Desde el 2006 y hasta el 2008, participé en el Festival de boleros Río Cauto, en cuya edición inicial alcancé el primer premio a nivel nacional.
“Mi repertorio lo integran obras destacadas del género: Psicología, En el Balcón aquel, En las tinieblas, Que murmuren, Vida consentida… y otras de los consagrados Pacho Alonso, Celio Adán González Ascencio, José Tejedor, Rubén Fuentes y Rafael Cárdenas, Orlando Vallejo, Homero Parra…”.
La falta de visión lo ancló a orillas del Cauto donde su caudal le desborda los recuerdos de antaño, en su interior el bolero se baña de felicidad con la letra que le seduce y atrapa: “Si llego a besarte como he soñado, ha de ser imposible que tú me olvides”.