Comúnmente los hombres se preocupan de manera excesiva por la forma, tamaño o grosor de su pene. En cambio, descuidan otros factores importantes que pueden, incluso, determinar su fecundidad; tal es el caso la cantidad de semen expulsado durante la eyaculación.
Según el sitio web Salud Savia la eyaculación casi siempre ocurre al mismo tiempo que el orgasmo y consiste en la expulsión de esperma a través de la uretra, la cual no fluye de manera constante, sino mediante varias contracciones, y en el transcurso de las primeras de ellas se secretan las mayores cantidades de semen.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, en un adulto sano el volumen del eyaculado se considera normal a partir de 1,5 mL.
Sin embargo, existen varones que cuando llegan al clímax segregan una cantidad de esperma inferior o advierten la ausencia de emisión seminal, alteración poco común denominada eyaculación retrógrada u orgasmo seco.
El desarreglo ocurre porque el músculo del cuello de la vejiga, que de manera habitual se cierra durante la eyaculación, no se tensa del modo adecuado y esta permanece abierta. Como resultado el semen entra en ese órgano, en lugar de ser arrojado hacia el exterior del cuerpo por la uretra.
Así, la totalidad de los espermatozoides o una gran parte de ellos se alojan en la vejiga del hombre y se desechan junto a la orina, razón por la cual esta última adquiere un aspecto turbio.
Entre las causas que provocan los orgasmos secos se encuentran intervenciones quirúrgicas de la próstata y la vejiga, radioterapias para el tratamiento del cáncer en la zona pélvica y daños a los nervios originados por afecciones como diabetes, esclerosis múltiples, lesiones de la médula espinal y la enfermedad de Parkinson.
También, el consumo de determinados fármacos utilizados para controlar la hipertensión, la depresión y el aumento del tamaño de la próstata, son otros de los factores que desencadenan la eyaculación retrógrada.
La patología ocasiona infertilidad masculina, ya que no se eyacula la cantidad de semen suficiente para transportar los espermatozoides desde el interior de la vagina de la mujer hasta el útero.
Las referencias bibliográficas consultadas concuerdan en que el padecimiento ocupa entre el 0,3 y el 2 por ciento de las causas de esterilidad en los hombres.
Geisis Fong Brull, especialista en Medicina General Integral, a cargo de la Consulta de Atención a la Pareja Infértil en el municipio Bayamo, declara que en los siete años que lleva establecida dicha área solo se han atendido tres casos de pacientes con eyaculación retrógrada.
“Entre ellos se encontraban jóvenes y adultos de avanzada edad, pero todos tenían en común la diabetes mellitus, enfermedad crónica que justifica la aparición del trastorno; ya que cuando no se trata adecuadamente y el doliente incumple los tratamientos orientados, se producen complicaciones de ese tipo”, explica además Fong Brull.
A pesar de que las contracciones del pene y de la uretra sin eyaculado pueden producir dolor, la alteración no representa un peligro para la salud del individuo.
Tampoco es un obstáculo dentro de la relación sexual, porque no interfiere en la erección o en la capacidad para alcanzar el clímax.
No obstante, se convierte en un problema cuando el hombre desea tener hijos y su condición no se lo permite, pues como consecuencia, algunos sujetos sufren perturbaciones psicológicas y disminución de la autoestima.
Las parejas en las que el varón tiene eyaculación retrógrada, al no poder concebir un embarazo de forma natural, deben someterse a procedimientos de reproducción asistida para conseguir la gestación, entre los que se encuentran la fecundación in vitro y la inseminación artificial.
Al respecto, la Doctora Fong Brull explica que los tratamientos se realizan en centros de alta tecnología, ubicados en Holguín, Cienfuegos y La Habana, cuya efectividad depende en gran medida de los años que lleva el paciente con esa patología y de la disciplina y el interés que tenga la pareja en lograr la procreación
Resulta importante, entonces, que, ante la presencia de los primeros síntomas del trastorno, se acuda a los servicios médicos especializados inmediatamente si se anhela formar una familia y asegurar la descendencia.