Deporte escolar: entre realidades y un propósito

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Por Leonardo Leyva Paneque | 12 septiembre, 2022 |
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FOTO Alexis Sánchez Jerez

Aunque la delegación de Granma no pudo igualar el cuarto puesto de 2019, jamás debería catalogarse de malo su desempeño en la recién concluida quincuagésimo octava edición de los Juegos nacionales escolares (JNE).

El descenso obliga -por supuesto- a repasar la estrategia, la cual rindió sus frutos en los últimos años, pero tal vez necesita actualizarse, a partir de las potencialidades existentes, en cuanto a reserva atlética y fuerza técnica.

¿Qué puede mejorarse?, ¿en qué se falló? Esas y otras interrogantes intentan responderse quienes conducen a la más joven generación de atletas en el territorio, como tampoco permanecen de espaldas a las limitaciones que continúan atentando contra el desarrollo. A ese análisis no deben escapar el levantamiento de pesas y la gimnasia artística.

Acostumbrados a pelear por el título, los gimnastas apenas ofrecieron resistencia a los punteros y cayeron al sexto. En esa emulación se vieron superados por Cienfuegos (367 puntos) y Camagüey (359), coincidentemente, las representaciones que -a la postre- terminaron relegando a la granmense (354.5) en la ubicación general.

Entretanto, los pesistas, que llegaron a eslabonar una cadena de seis coronas consecutivas, fueron a parar al cuarto lugar. Pero lo más llamativo recae en el resultado de las pruebas técnicas, al ubicarse por detrás de una decena de equipos y por debajo de la media nacional.

Todo indica que peligra el futuro inmediato y el espacio entre los primeros escaños. Al parecer, se ha descuidado el sostenido trabajo de años anteriores en la base y en la selección de nuevos talentos, por lo que ya comienza a perder calidad la matrícula de la Eide.

En cambio, la esgrima sorprendió con su asalto a la cima, al igual que el triatlón; y en el softbol femenino se volvió a levantar el trofeo, quehacer que igualaron tanto las hembras como los varones en la Olimpiada juvenil (OJ).

En esa justa, la embajada granmense se colocó quinta, con el aporte indiscutible de los forzudos y el softbol, en uno y otro sexo, líderes en sus respectivas clasificaciones.

A pesar de algunos sinsabores, Granma recibió reconocimientos en la Gala de clausura, celebrada esta semana en la capital cubana. La bayamesa Isabela Rojas Rojas (gimnasia rítmica) mereció la distinción de mejor atleta femenina en el apartado de arte competitivo de la OJ y Omar Alberto Cruz Espinosa la del masculino en la Copa Pioneros, luego de arrasar en el torneo de gimnástica. También, la Eide Pedro Batista Fonseca sobresalió en el ámbito docente entre sus similares del país.

El tercer lugar de 2017 y 2018 en los JNE sobresale como lo más destacado de Granma en estas citas y, aunque parece lejano, luchar por acercarse debe constituir un propósito inaplazable para el movimiento atlético aquí.

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