“Cuando el cineasta Daniel Diez Castrillo llegó a la sede del Comité provincial del Partido en Granma, con la idea fundacional de la TV Serrana (TVS), yo atendía los medios masivos de difusión a ese nivel, me pareció una idea genial, de inmediato lo comuniqué al Buró, y tramitamos el proyecto, afirmó Luis Rondón Remón, promotor ideológico de la Telecomunidad Serrana.
“Por esos días, en que el período especial se empeñaba en hacer más dura la vida de los cubanos, atendimos también a un representante mexicano, enviado por la Unesco, y luego a Norberto Abréu Lizaso, de La Habana, quien fue a ofrecer apoyo técnico.
Subimos a San Pablo de Yao, en Buey Arriba, y de ahí a la casa de visitas, de El Cedrón, enclavada en la zona, donde ultimamos otros detalles.
“En principio, escogimos ese lugar y, como segunda opción, las naves de la Forestal, días después un deslizamiento de tierra sepultó aquel hospedaje y nos quedamos con la segunda variante.
“Luego del estudio previo del local y sus alrededores, comenzaron las adaptaciones del inmueble: cubículos de edición y cabañas para los realizadores, acciones que semanalmente chequeábamos a pie de obra, el resto del tiempo lo dedicábamos a buscar recursos para seguir adelante.
“Paralelamente se formuló la convocatoria para captar al personal, realizaron entrevistas en la Escuela provincial del Partido, de Bayamo, y una vez seleccionados los futuros trabajadores de la televisora, inició el trabajo con mayor rigor.
“Unos subían y bajaban diariamente por aquel enclave de la Sierra Maestra, al final quedaron los de más posibilidades y de inmediato comenzaron las captaciones a personas del lugar, para unirse al entrenamiento grupal.
“Fue una etapa grandiosa, por vez primera los campesinos de la serranía comenzaban a ver sus rostros reflejados en pantalla, algo inimaginable, lo nunca visto en esa región del Oriente cubano.
“Rescatar las tradiciones de la montaña, su cultura, las formas de vida, creencias y otros comportamientos locales, hasta ese momento no reflejados en la TV nacional, constituyó el objetivo inicial de la naciente productora de documentales y videos.
“Era algo diferente a lo acostumbrado y aunque no transmitía como canal, evidenciaba una estrategia audiovisual muy parecida a la serranía granmense.
“Desde los momentos fundacionales la TVS contó con el
apoyo del Instituto Cubano de Radio y Televisión, Telecubanacán, Tele Cristal, el Centro Memorial Martin Luther King y personalidades que donaron bibliografías y materiales educativos para la formación del personal.
“El 15 de enero de 1993, desde una torre cercana se trasladaba la señal a Holguín, para encadenarse con la Televisión Nacional, en La Habana, donde el director de la Unesco, Federico Mayor Zaragoza, pronunció las palabras centrales de aquel acontecimiento histórico-social.
“Asistíamos al nacimiento de la primera televisora comunitaria y participativa de América Latina, orgullo de quienes la conocemos”.