
Los apicultores granmenses están comprometidos en cumplir las mil 340 toneladas de miel de abejas, correspondiente al 2022, no obstante los atrasos que registran al cierre del noveno mes del año.
José Causilla Guerra, director de la Unidad Empresarial de base(UEB) apícola Granma, dijo que trabajan para alcanzar las 453 toneladas que le restan al plan durante el último trimestre, período óptimo para las floraciones, principalmente, de las campanillas Morada y Blanca y del Bejuco Indio o Leñatero.
Causilla Guerra explicó que no renuncian a obtener este resultado, pese a las adversidades provocadas por las carencias de algunos recursos a causa del despiadado bloqueo económico, comercial y financiero del Gobierno de Estados Unidos, además, de otros factores meteorológicos que influyeron.
Reconoció que como parte de las 63 medidas aprobadas por el Estado cubano para el sector agropecuario, la UEB y sus 303 productores, tres Unidades básicas de producción cooperativa y otras entidades afines poseen incentivos para garantizar la calidad y variedad de la miel.
Mientras, logran crecimientos en otros derivados de la rama en los programas de la cera y propóleos, la producción de 25 mil abejas reinas e igual cantidad de colmenas, lo que posibilitará los rendimientos de 42 kilogramos por colmena.
Niquero, Pilón, Media Luna y Campechuela son los municipios que deben aportar más, por los volúmenes del delicioso y nutritivo endulzante a la meta provincial y los productores Alexander López Soler, Jorge Luis Blanco Linares, Hipólito Ezequiel Torres González y Elier Mora Sánchez.
Granma tiene una significativa contribución en el caso de la miel ecológica, muy demandada en el mercado internacional y de superior precio y está avalada como la segunda mayor productora después de Matanzas.
La miel es un fluido dulce y viscoso producido a partir del néctar de las flores, con uso en la cocina y la pastelería, con propiedades terapéuticas, energéticas, cicatrizante, y resulta un excelente conservante natural.
Acorde con especialistas, ese fluido posee numerosos beneficios para la salud humana; la cera de abeja se emplea como ingrediente para ungüentos, medicinas, jabones y betunes; y el propóleo fortalece el sistema inmunológico.