
El empuje arrollador del Club de motos local, promotores institucionales y comparseros infantiles, abrieron paso a la trigésima octava edición de la Jornada de la Cultura Bayamesa, iniciada este viernes, cuyas acciones se extenderán hasta al venidero 2 de abril.
“Bayamo la espera, porque en ella está la fuente viva de los más genuinos valores de la cultura nacional y aunque por fuerza mayor se descolocó de su fecha tradicional, abrazará a la cocina mambisa, la música tradicional, la literatura, las serenatas matizadas con el frescor de la modernidad, sin perder las esencias, ni dejarse provocar por el fenómeno globalizador y neoliberal de la cultura, expresó el presidente de la Unión de Historiadores de Cuba en Granma, Javier Andrés Vega Leyva, al inaugurar el evento frente a la Casa de cultura 20 de octubre.

“Inicia una jornada síntoma de bienestar y espiritualidad de todo un pueblo que cala y es parte sustancial de la identidad de la ciudad”, precisó.
Durante la noche del 30, y como actividad pre evento, quedó inaugurada en la referida institución la expo bipersonal Resiliencia, de los artesanos Adriel Hernández Cutiño y Andrés Adrián Ortiz Blanco, pertenecientes al proyecto Bayam.
La programación, en defensa de lo autóctono y la cultura local, incluye en sus tres días: exposiciones y concursos variados, conciertos, homenajes a personalidades e instituciones del sector, espectáculos infantiles, descargas trovadorescas y presentaciones musicales, teatrales, danzarias y de proyectos socioculturales comunitarios.
Figuran entre los principales escenarios: las plazas de la Revolución y de la Patria, la Ventana de Luz Vázquez, los museos Casa natal de Carlos Manuel de Céspedes, Ñico López y de Cera, la Casa de cultura 20 de octubre, elparque Francisco Maceo Osorio, la Barranca de la Lizana, el Paseo General García y comunidades bayamesas.
Sus exaltaciones destacan: el aniversario 510 de la Villa San Salvador de Bayamo, el 155 de nuestras guerras por la independencia, el 70 del asalto al cuartel Carlos Manuel de Céspedes, el 55 de la Casa natal del Padre de la Patria y el 45 del Museo Ñico López y las siete décadas de la poetisa Lucía Muñoz Maceo.
El evento mantiene, además, como motivación, aquel 27 de marzo de 1851, día en que la canción La Bayamesa estremeció a la sociedad del siglo XIX, luego de su interpretación frente a la ventana de Luz Vázquez y Moreno.

