¿A dónde fue esa esencia movilizadora?

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Por Sara Sariol Sosa | 13 mayo, 2023 |
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Fidel en la sede del contingente Celia Sánchez Manduley, que construyó la presa Cauto del Paso, colectivo ejemplar, que hizo de la emulación un motor para impulsar la obra/ FOTO Archivo La Demajagua

Por estos días, en los cuales el plátano burro insiste en hacerse el inaccesible, Santiago Idel, un trabajador del sector agropecuario en Granma, recordaba aquellos tiempos en que esa bendita vianda reinó aquí, a cuenta de áreas de cultivo intensivo y con riego localizado microjet.

Había, rememora, un amplio movimiento productivo que nació antes del período especial, pero incluso logró mantenerse tras aquella dura etapa.

El programa apostó por elevados niveles productivos, con sostén en la selección de semillas de superior calidad para lograr plantas muy resistentes a altas temperaturas, lo cual era perfectamente posible, porque la provincia, en honor a la verdad, fue siempre vanguardia en investigaciones con esos propósitos.

Otras cosas llamaban poderosamente la atención en ese sistema: la utilización de yuntas de bueyes para el acarreo de las producciones en las áreas de cultivo, y la inigualable imagen de los llamados cabezales, especies de pequeñas casas atendidas por mujeres (cientos encontraron empleo en esos menesteres), desde donde se manejaba el progresivo riego de las plantaciones.

Aquellas féminas, recuerda, además tenían los cabezales quizás más embellecidos que sus propios hogares, pulcros y rodeados de jardines, animadas por una emulación que se traducía en esfuerzo del bueno.

La remembranza nos llegó, a propósito de que este medio de prensa se planteara la pertinencia de hablar sobre el rescate del movimiento emulativo, algo que hasta hoy muchos nos preguntamos por qué se perdió, y cuánto aportaría en este tiempo, al no conseguido empeño de fortalecer la empresa estatal socialista.

HERENCIA Y RECESIÓN

Habíamos heredado ese fenómeno social, cual expresión de la energía creadora de las masas trabajadoras, que tiende a acrecentar en todo lo posible la producción socialista.

Se presentó como la manera de elevar el espíritu creador, consciente y libre del pueblo,  forma en que  manifiesta aptitud y talento, y la fuente para su desarrollo estribaba en el cambio radical de la actitud  frente al trabajo en el régimen socialista, cuando por primera vez el trabajo forzado se sustituía por el realizado para uno mismo y para la sociedad socialista. Lenin escribió que el comunismo comienza donde aparece la preocupación de los simples obreros por los bienes de la sociedad, por los bienes destinados al conjunto de toda la sociedad.

Nos la habían diseñado los clásicos como forma de la organización socialista del trabajo, basada en la amistad, en la ayuda mutua y en el colectivismo.

Tuvo la emulación como rasgos característicos, la socialización de los éxitos de las empresas y los trabajadores en la producción, el apoyo a los rezagados para que alcanzaran el nivel de los que iban en primera fila, la amplia difusión de la experiencia de vanguardia.

La emulación, sin dudas, impactó en el rendimiento del trabajo, la maestría de los obreros y el desarrollo de la nueva técnica.

El Comandante en Jefe Fidel Castro reconocía, en ocasión del primer Encuentro nacional de emulación, en el teatro de la CTC, el 6 de marzo de 1964, que:

“Esta magnífica institución de la emulación, que tiene un valor social incalculable, porque estos obreros serán ejemplo y serán estímulo para todos los trabajadores, esta formidable institución ha de ofrecer a nuestro país los servicios no solo que da el ejemplo, no solo los bienes materiales que se deriven de la elevación de la conciencia de los trabajadores y el espíritu de trabajo, sino también ha de tener un gran valor social, porque esta institución sirve para ir señalando cada año de entre los trabajadores, los más competentes, los más esforzados, los más cumplidores.

“Y una de las cuestiones que ha de preocuparnos siempre mucho, siempre, y sobre todo cuando pensemos en el mañana -no en el presente que nos ha obligado a muchas tareas de distintos tipos, sino cuando pensamos en el mañana- es cuáles son los mecanismos, cuáles son los canales mediante los cuales nuestro pueblo, nuestro Partido, nuestro gobierno, les abre paso a los mejores ciudadanos, a los mejores hombres y mujeres del pueblo. Porque algo en lo que debemos preocuparnos es que haya siempre una luz verde al mérito…”, advertía.

Pero años atrás, por males de diversa índole, aquella emulación fue perdiendo su esencia movilizadora, y su mala conducción convirtió al movimiento sindical en un ente alternativo de distribución de estímulos no siempre justificados.

Esquematismos y falta de rigor llevaron a fenecer esa palanca movilizadora, a la cual no pocos trabajadores le entregaron sus mayores energías, donaron períodos completos de vacaciones, e hicieron bailar las mochas en los cañaverales desde el alba hasta el anochecer.

No fue la emulación la culpable, sino los errores humanos que la distorsionaron; muchos perdían motivación, además del interés por mostrar la  capacidad y el talento que los hacían destacarse en los colectivos.

Hay, hasta hoy, cientos de trabajadores que cuestionan el hecho, y la incorrecta interpretación de la necesidad de eliminar gratuidades indebidas. No era ese el caso de los vanguardias, porque cuando estos disfrutaban con sus familias en una institución turística, ya habían pagado antes con titánico esfuerzo esa estancia.

Mas, desde entonces, la estimulación material, que sabemos que impacta tanto como la moral, quedó en terreno de nadie, aun cuando tal incentivo pasó a ser responsabilidad de las empresas, para que estas,  teniendo en cuenta sus utilidades y después de cumplidos los requisitos establecidos, crearan fondos para el desarrollo, las inversiones y la estimulación a los trabajadores.

AÚN VIVE ALLENDE…

Pero la emulación tiene fuerza todavía en otros lugares, de esa manera nos lo corroboró una reciente búsqueda, a propósito del presente trabajo, mediante la cual conocimos, por citar un ejemplo, de la integración de las instituciones anexas de la Federación General de los Sindicatos de la República Democrática de Corea, en el movimiento de emulación socialista de 2023.

De acuerdo con el reporte de Prensa Latina al respecto, dichas organizaciones señalaron su compromiso de cumplir el plan quinquenal con la determinación de forjar una nueva coyuntura de auge de la construcción socialista al estilo coreano, y la voluntad de concretar las 12 metas importantes para el desarrollo de la economía nacional este año.

Se establecían los puntos y metas de la emulación, para que los sectores y unidades cumplan sus planes, para el impulso de la economía nacional, para que los trabajadores se involucren de forma masiva en la lucha por el incremento de la producción, lo cual constituye un incentivo para el país.

En fin, que la emulación sigue constituyendo en esencia, un elemento removedor de voluntades productivas, de lo cual tan urgidos estamos nosotros, para dinamizar la economía cubana.

 

 

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