
Un proyecto gastronómico de subordinación local se gesta en Bayamo desde el 27 último con ofertas de productos asequibles a la población.
En el denominado Centro Comercial Pancon, un complejo de panadería y dulcería ubicada en calle Parada entre Martí y Cisneros, los bayameses encuentran variedad, calidad, y precios por debajo de los actuales en comparación con establecimientos estatales y particulares.
“La idea surgió por una preocupación de la máxima dirección política y gubernamental de este territorio, de convertir esta unidad gastronómica en un proyecto que responda a las necesidades del pueblo, a partir de la compleja situación que atravesamos, demostrando que sí se pueden bordear los obstáculos de la inflación y los altos precios”, señala su administrador Marco Antonio Pérez González.
“Los precios son aquí coherentes, acordes al momento”, afirma Nelia Martínez, clienta que por primera vez visita el lugar, no obstante sugiere más agilidad en el servicio. Igual opinión manifiesta Bárbaro Estrada Silvera, quien agrega que debe haber mayor organización en el expendio.
“Este es un colectivo joven con muchas ganas de hacer; es verdad que falta más preparación, pero vamos a trabajar poco a poco en la imagen, el buen trato y la buenas prácticas comunicativas, así como en la competitividad para ser un punto gastronómico de referencia en la provincia”, asegura Pérez González.
-¿Como tienen implementado el modelo de autonomía y de gestión estatal?
-Estamos encadenados con empresas estatales y productores privados. Es la Empresa Provincial Integral de la Industria Alimentaria (EPIIA) a la que pertenecemos, la encargada de las contrataciones con las fuentes de materias primas.
“Por ejemplo, el yogurt, el queso y las pulpas las obtenemos de la finca San José del productor Orozco en Cerca Blanca aquí en Bayamo, mientras que el sirope no los suministra Medilip”, refiere.
Advierte que el insumo que más los afecta es la harina para la repostería por su elevado importe, pero que la empresa trabaja con precios diferenciados con Mipymes.

“Abrimos de martes a viernes de 9:00 a.m a 9:00 p.m; los sábados de 9:00 de la mañana a 11:00 de la noche y el domingo está dedicado a los infantes, y las ofertas incluyen variedades de dulce como el buñuelo bayamés, la marquesita y el cake, este último con un precio de 380 pesos.
“También ofertamos jugos de frutas naturales, refresco gaseado, batido, pizza y pan con diversas elaboraciones de queso; siempre tratamos de tener más de 15 ofertas para hacer sostenible el servicio”, agrega.
Aclara que aunque la venta es liberada también es limitada sobre todo los dulces: “pensamos siempre en el pueblo, que todo el mundo pueda alcanzar, por eso decidimos que la venta de los dulces sean hasta un total de 10 entre las diferentes variedades”.
-¿De cara al futuro?
“Aunque recién abrimos, estamos buscando otras alternativas para diversificar los servicios, por ejemplo, emplear la creatividad culinaria para la elaboración de novedosos platos y el servicio de mensajería para cumpleaños.
“Además la creación de un espacio para niños los domingos de 9:00 a.m a 12:00 p.m, con música infantil, y actividades recreativas de conjunto con la Dirección de Cultura en el territorio.
La alta presencia de público por estos días en el Centro Comercial Pancon, es muestra de la efectividad del nuevo modelo de gestión estatal para satisfacer las necesidades de la población sin conflicto con los precios.