Dejando la mejor imagen, la selección de Bayamo se despidió hoy de la Serie Mundial de las Pequeñas Ligas de béisbol, al caer 3×2 ante su similar de Santiago de Veraguas, de Panamá.
En el Volunteer, de Williamsport, Pensilvania, Estados Unidos, uno de los dos estadios que sirven de sede a la justa, la ofensiva de la representación cubana no pudo descifrar los envíos del talentoso lanzador Omar Vargas, quién se apuntó el segundo triunfo.
Durante cuatro entradas y dos tercios de labor, Vargas permitió apenas un indiscutible, otorgó un boleto y propinó 10 ponches, al tiempo que dejaba sin carreras a la tanda bayamesa.
Cuando faltaban dos out para decretar el éxito de los panameños, llegó la reacción de los alumnos de Vladimir Vargas, que esquivaron la lechada y descontaron dos rayitas por el jonrón de Luis Aparicio, en el cierre del sexto capítulo.
Después de ponchar a Samuel Palencia y admitir sencillo de Heikel Reyes, el relevista Allan Rodríguez soportó ese estacazo que se llevó las cercas del jardín izquierdo, pero se las ingenió para retirar a los dos próximos bateadores y así asegurar la victoria.
Los istmeños habían asegurado el triunfo en el cuarto inning, cuando agregaron dos marcas y tomaron ventaja decisiva de 3-0 frente al derecho Ismael Ortega, abridor y perdedor del encuentro.
Ortega tuvo que abandonar el montículo con las bases llenas y desde el campo corto vino a su rescate Edgar Torres que, aunque no pudo evitar el fly de sacrificio que remolcó la tercera de los vencedores, sofocó la rebelión.
A pesar de constantes amenazas, Torres dio par de escones consecutivos, pero en causa perdida porque sus compañeros no pudieron remontar y vieron frustrado el sueño de seguir avanzando.
Así terminaba el camino de los bayameses por Williamsport, el que comenzaron a labrar desde que eliminaron a Santiago de Cuba y concluyeron ganando ante Habana del Este, en el campeonato nacional.
A ellos se les recordará no solo por haber sido el primer conjunto cubano en participar en estos eventos, también por la pasión y entrega que pusieron sobre el terreno.