El 13 de noviembre de 1906, hace 117 años, fue constituido el Partido Socialista de Cuba, primero del país de tendencia marxista, nacido de la unión del Partido Obrero Socialista y de la Agrupación Socialista Internacional.
Los dirigentes obreros Carlos Baliño y Diego Vicente Tejera fueron las figuras principales de la nueva organización. Carlos Baliño, luchador honesto contra todas las formas de la esclavitud humana y las injusticias.
En esta época, el proletariado cubano estaba organizado fundamentalmente en asociaciones que de manera continuada se originaban huelgas por la desesperada situación de descontento de los obreros al no lograr las peticiones por las que luchaban.
La nueva organización da a conocer un manifiesto en el cual precisa sus fundamentos programáticos, al proclamar el principio UNIDOS BAJO UNA SOLA BANDERA Y CON UNA ASPIRACIÓN COMÚN, señala a la clase obrera su papel protagónico en la lucha por la revolución social.
Durante el gobierno de Tomás Estrada Palma se agudiza la situación del proletariado. Al sector tabacalero se le niega la posibilidad de ocupar una plaza como aprendiz en las fábricas de tabaco, sin embargo el trabajador español es el preferido. Esto demuestra el grado de inferioridad que tienen los cubanos.
Estos atropellos e injusticias llevaron a los trabajadores a la lucha que tuvo su manifestación en la “Huelga de los aprendices”, entre los días 4 y 28 de noviembre de 1902.
En respuesta a la combatividad de los huelguistas, el gobierno desencadenó la represión: fueron atacadas las asambleas, clausurados numerosos locales y apaleados los trabajadores que participaban en las manifestaciones públicas.
El Partido Socialista Cubano tuvo una efímera vida, aun así constituyó el primer intento de organizar al proletariado cubano, en un partido político independiente, y que tuvo su continuación en 1925 cuando Carlos Baliño, seguido por una nueva generación de cubanos representados por Julio Antonio Mella, fundó el primer Partido Comunista de Cuba.