Cuando se funda el periódico Patria, hace 132 años José Martí era uno de los periodistas más conocidos en América Latina por sus trabajos en importantes publicaciones como El Partido Liberal de México y La Nación de Buenos Aires, entre otros.
El primer número de Patria correspondió al 14 de marzo de 1892. En él fue insertado un artículo titulado “Nuestras Ideas”, en el cual Martí expresó: “Nace este periódico, por la voluntad y con los recursos de los cubanos y puertorriqueños independientes de New York, para contribuir, sin premura y sin descanso, a la organización de los hombres libres de Cuba y Puerto Rico, en acuerdo con las condiciones y necesidades actuales de las Islas, y su constitución republicana venidera; para mantener la amistad entrañable que une, y debe unir, a las agrupaciones independientes entre sí, y a los hombres buenos y útiles de todas las procedencias, que persistan en el sacrificio de la emancipación, o se inicien sinceramente en él; para explicar y fijar las fuerzas vivas y reales del país, y sus gérmenes de composición y descomposición, a fin de que el conocimiento de nuestras deficiencias y errores, y de nuestros peligros, asegure la obra a que no bastaría la fe romántica y desordenada de nuestro patriotismo; y para fomentar y proclamar la virtud donde quiera que se la encuentre. Para juntar y unir, y para vivir en la pasión de la verdad, nace este periódico.
Los emigrados cubanos guiados por José martí crearon el periódico Patria y el Partido Revolucionario Cubano como guías indispensables para alcanzar la independencia de Cuba.
En la página tres de ese primer ejemplar, Martí razona en un artículo titulado A nuestra prensa sobre el papel que le corresponde en la batalla por la independencia y la libertad. Y, en tal sentido, escribe:
Nace este periódico, a la hora del peligro, para velar por la libertad, para contribuir a que sus fuerzas sean invencibles por la unión, y para evitar que el enemigo nos vuelva a vencer por nuestro desorden.
La desunión, la dispersión, la envidia, contribuyeron a la derrota de 1868, por eso Martí trabaja sin descanso por la unidad firme, real, creadora, y prosigue describiendo el perfil de esa trinchera de papel:
Una es la prensa, y mayor su libertad, cuando en la república segura se contiende, sin más escudo que ella, por defender las libertades de los que las invocan para violarlas, de los que hacen de ellas mercancía, y de los que las persiguen como enemigas de sus privilegios y de su autoridad. Pero la prensa es otra cuando se tiene enfrente el enemigo. Entonces, en voz baja se pasa la señal. Lo que el enemigo ha de oír, no es más que la voz de ataque. Eso es “Patria” en la prensa. Es un soldado. Para el adversario mismo será parco de respuestas, y en vano se le querrá atraer a escaramuzas inútiles, porque cada línea de los periódicos de la libertad es indispensable para fundarla; aun el adversario hallará en nosotros más bálsamo que acero. El arma es para herir, y la palabra para curar las heridas (…)
Patria reflejó en sus páginas los preparativos de la guerra, los problemas de Cuba y Puerto Rico, el proceso de formación y avance del Partido, las mentiras e intrigas del enemigo, la forma de superar los errores y las contradicciones en el campo revolucionario, las crónicas de la guerra, anécdotas, noticias y otras como aquella de enseñar a los mambises a alimentarse en el monte, a vestirse, en fin el arte de pelear.
Cuando Martí decide marchar a Cuba para incorporarse al Ejército Libertador, Patria está en su pensamiento.
Dos días después de estallar de la Guerra Necesaria, José Martí envía, desde Santo Domingo, una carta a Gonzalo de Quesada y a Benjamín J. Guerra, en la cual da orientaciones y recomendaciones sobre la forma y el contenido de ese periódico. “Embellezcan y regularicen a “Patria”(…) mucha noticia ahora (…) todo lo de Cuba (…) y siempre amenidad revolucionaria (…)”.
En carta redactada el 10 de abril de 1895 por Martí en vísperas de embarcar a Cuba junto con Máximo Gómez escribe:
“(…) Patria ha de ser ahora un periódico especialmente alto y hermoso. Antes, pudimos descuidarlo, o levantarlo a braceadas; ahora no. Ha de ser continuo, sobre las mismas líneas, afirmando con majestad lo contrario de lo que se afirma de nosotros. (…) A lengua sinuosa nos están batiendo: cerrémosles el camino a mejor lengua, la hermosa…”
Patria nos une, Patria es el soldado de la pluma y la palabra, de la libertad y del buen hacer de los profesionales de hoy.