Exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas en huelga de hambre

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Por Cubadebate | 10 abril, 2024 |
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Una partidaria del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas fuera de la cárcel de La Roca de Guayaquil.DOLORES OCHOA

Este miércoles se confirmó que el exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas fue internado el pasado lunes debido a “un intento de suicidio”, confirmó el expresidente Rafael Correa en X.

“Hemos confirmado que la emergencia médica fue intento de suicidio. No ha comido nada y se encuentra en huelga de hambre”, indicó el exmandatario, quien precisó que finalmente en esta jornada, Glas pudo contactarse con su defensa y sus familiares.

El arresto del ex vicepresidente coronó una semana de crecientes tensiones entre México y Ecuador, luego de que Quito declarara persona non grata a la embajadora mexicana, citando comentarios “desafortunados” del presidente izquierdista mexicano, Andrés Manuel López Obrador.

Glas fue trasladado al hospital el lunes debido a que se negó a ingerir la comida que le proporcionaban en la cárcel y se enfermó, según la agencia penitenciaria SNAI, pero recibió el alta médica el martes y regresó a prisión.

Del mismo modo, Correa responsabilizó al presidente “Daniel Noboa por la integridad física y emocional de Jorge [Glas]” y le llamó a recordar que “claramente ha cometido el delito tipificado en el artículo 125 del código penal” del país.

Maltrato físico

Por su lado, Sonia Gabriela Vera García, miembro del equipo de abogados que defiende a Glas, publicó en sus redes sociales un extracto de la conversación que sostuvo con el exvicemandatario, en la que relató los vejámenes a los que fue sometido durante el asalto a la Embajada mexicana en Quito.

Glas contó que antes de leerle sus derechos, cuatro policías lo maniataron y lo golpearon brutalmente y luego procedieron a filmar una escena trucada, en interés de hacer parecer que se le había respetado su integridad.

“Luego me vuelven a filmar para hacer un amague (…). Yo estaba todo apaleado y me ponen nuevamente a leerme los derechos. Se pone la policía a leer y me sientan ahí y yo me desvanezco. Y todavía me dicen: ‘párese, párese’. Yo trataba de pararme, pero no podía por la paliza que me habían dado”, relató.

(Con información de RT en Español y La Jornada)

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