
El destacado investigador y escritor cubano Samuel Feijoo falleció en La Habana el 14 de julio de 1992.
Nacido en 1914, en el poblado de San Juan de las Yeras, en la antigua provincia de Las Villas, desde joven se dio a conocer inicialmente como poeta, pero su labor se extendió a la investigación, la novela, el cuento, la crítica y la pintura.
Durante su existencia, además de escribir poemas y novelas, realizó un ingente trabajo para rescatar las genuinas tradiciones latinoamericanas y llegó a recopilar fábulas atesoradas por la memoria popular.
Reflejó en sus libros aspectos relacionados con grandes figuras de la cultura cubana, como fue el caso de la poesía de Juan Cristóbal Nápoles Fajardo.
Publicó alrededor de una veintena de libros de poesías y otras obras como investigador, entre ellas las tituladas Cuentos Populares Cubanos, Azar de lecturas, Por una poesía cubana, Cuentos de humor cubanos, y El negro en la literatura folclórica cubana, entre otros.
También forma parte de su obra los libros Tres novelas de humor, Juan Quinquín en Pueblo Mocho, Cuenta cuentos, Tumbaga y Mitología Cubana.
En Feijoo, el humor criollo constituyó un elemento inseparable en toda su obra narrativa e incluso en sus trabajos de pintura. Fue un cubano sencillo que solía decir con particular relieve: “No me gusta la conversación peinada, ni el merengue retórico.”