Andy Granda (más de 100 kg) quedó a un “tilín” del podio, tras ceder hoy en la disputa del bronce frente a Temur Rakhimov, de Tayikistán, en la penúltima jornada del judo en los Juegos Olímpicos de París 2024.

El matancero no pudo responder al waza-ari que marcó Rakhimov casi a los dos minutos y medio de combate, para terminar quinto y estampar la mejor actuación entre los cuatro yudocas que presentó la Mayor de las Antillas en la capital de Francia.

Granda había comenzado su segunda participación en citas bajo los cinco aros con ippon sobre el mongol Marvin Gadeau, antes de caer en cuartos de final frente al japonés Tatsuru Saito, en Golden Score, luego de ocho minutos de pelea.

A pesar de ese revés, se mantuvo en la batalla por las preseas, y en uno de los dos pleitos de repechaje venció por descalificación (tres penalizaciones) al azerí Ushangi Kokuari y así avanzó a la porfía del bronce.

Idalys Ortiz (más de 78 kg) también se fue sin medallas, después de imponerse a la india Tulika Maan y perder frente a la serbia Milica Zabic, en octavos de final, fracaso que la dejó sin opciones de acceder a la repesca.

Ortiz dijo adiós, pero deja una linda historia en cinco incursiones olímpicas, con cuatro premios: oro en Londres 2012, platas en Río 2016 y Tokio 2020, y el bronce de Beijing 2008.

Además, el judo cubano vio trunca la cadena de ocho ediciones consecutivas subiendo al podio, incluyendo la categoría súper pesada para féminas, luego del par de metales de plata que alcanzaron Estela Rodríguez (Barcelona 1992 y Atlanta 1996) y Daima Beltrán (Sidney 2000 y Atenas 2004), antecesoras de la artemiseña Ortiz.

El certamen concluirá mañana con el torneo por equipos mixtos, en el que Japón tratará de tomar desquite por partida doble de lo sucedido en sus predios, hace tres años, cuando los ahora locales les arrebataron la corona.