
La exposición fotográfica Paradigma universal, que ilustra el paso de Fidel Castro por diferentes escenarios de Granma, desde el 2 de enero de 1959 hasta julio de 2006, fue inaugurada en la Casa de la cultura 20 de Octubre, de Bayamo, como parte de la Jornada de la cultura bayamesa, y en homenaje al 90 cumpleaños del líder histórico.
Unas 17 instantáneas, de formato 8X10, eternizan momentos trascendentales de su visita al Monumento Plaza de la Patria, el 26 de Julio de 1982; durante la toma de Bayamo, el 2 de enero de 1959; mientras saludaba al fotógrafo Rolando Avello Vidal y pronunciaba su discurso desde el Ayuntamiento de Bayamo, en igual fecha.
Otras imágenes eternizan su encuentro con Camilo, el 3 de enero de 1959 en la Ciudad Monumento Nacional; visitando la redacción del periódico La Demajagua; mientras inauguraba el hospital Celia Sánchez Manduley, de Manzanillo, en 1981, y el programa de salas de televisión.
Las más recientes, refieren su presencia durante el acto de conmemoración del ataque de Bueycito; junto con el Primer secretario del Partido en Granma, Lázaro Expósito Canto, el 26 de julio de 2006, y en ese mismo escenario, entregándole a este la Condición de Mejor provincia.
Lino Valerino Cámbar, presidente de la Asociación de fotógrafos de Bayamo, valoró esta como una exposición colectiva, en la que convergen instantáneas suyas y de sus homólogos, Luis Carlos Palacios Leyva, Ibrahím Jacas Jiménez, Rolando Avello Vidal, Orlando Fombelllida Claro y Rafael Martínez Arias.
“Hemos tenido el orgullo de fotografiar a Fidel en varias ocasiones, por nuestro trabajo, y créeme que no es fácil. Si tú no te concentras y te pones a escucharlo, no le tiras fotos. Tienes que inhibirte en ese momento y pensar que eres fotógrafo y no oyente para poderlo captar, porque él es una gente muy carismática. Bueno, lo ha demostrado, tengo entendido que es el hombre más fotografiado del mundo”, refirió Luis Carlos Palacios Leyva, uno de los autores.
Lino Valerino, por su parte, refirió: “Ver a Fidel parado de ti, a un metro y medio, conversando con alguna gente, es una cosa que…tú sientes que…se te erizan los pelos, sientes que te va a preguntar algo y que tú no le vas a saber contestar, y eso lo sentí una vez.
“Después cuando estuve en el congreso de la ACLIFIM, que me tocó retratarlo, él le pidió a una limitada física que no tenía brazos, que le escribiera algo, porque si ella era fiscal, cómo ella escribía.
“Y ella dijo ah, sí. Le tiran una agenda en el piso. Ella escribe. Él se va a agachar, y ella le dice, no no, un momento.
“Arranca la hoja y se la pone en los pies, y dice él, es increíble.
“La fiscal le respondió, No, es creíble. Es lo que yo he aprendido, porque la Revolución me lo ha enseñado. Fíjese que yo soy negra, de Guantánamo, de un barrio; soy limitada física, física, pero no de mente, y con ayuda de la Revolución he podido llegar a ser fiscal.
“El Comandante le dijo, qué bueno, que la Revolución ha llegado a Guantánamo, y la abrazó.
“Esas son cosas que te dejan movido, y tú quisieras decirle, déjeme tirarme una foto con usted, pero, no te sale”, narró Cámbar.
Palacios Leyva recuerda una característica del Comandante: su cortesía con la prensa: “Siempre con la prensa tuvo esa deferencia, las veces que ha estado en Granma, inclusive cuando se inauguraron los contingentes de la presa Cauto el Paso, Corojo, él siempre, la prensa, dejen pasar a la prensa, que si no después nadie se entera. Ese es Fidel.”