Ciego de Ávila, – Ante el reto de lo cambiante de los tiempos actuales, con desafíos para Cuba como una economía asediada por el bloqueo del gobierno de Estados Unidos, la guerra mediática y la compleja realidad social y cultural que emerge en medio de adversidades de esa naturaleza, en renovarse está la apuesta de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR).
Sobre tales temas profundizó hoy Gerardo Hernández Nordelo, Héroe de la República de Cuba y coordinador nacional de los CDR, durante el discurso pronunciado en el acto central por el aniversario 65 de la fundación de la mayor organización de masas del país, celebrado en la zona 76 del Consejo Popular Indalecio Montejo, en el reparto Ortiz, de la ciudad de Ciego de Ávila.
“Nuestra organización está obligada a ser un espacio de participación activa, de construcción comunitaria y diálogo abierto sin olvidar lo que nos expresó el General de Ejército Raúl Castro Ruz, en el VIII Congreso de los CDR, cuando alertó que hay que cambiar los métodos de lucha, pero jamás el combate”, expresó.
Asimismo, el también miembro del Consejo de Estado alertó sobre la inmutabilidad del imperialismo en sus planes contra Cuba, tal vez más siniestros, ante los cuales el antídoto más potente resulta la sabia idea de la unidad popular y las masas organizadas como fortaleza de invencibilidad.
Hernández Nordelo significó que los CDR deben ser artífices de innovación, en el impulso a programas que integren a la juventud, que faciliten el acceso a la cultura y la educación, que promuevan la salud comunitaria y la protección a los más necesitados en cada lugar.
El contexto internacional, la presión económica y las transformaciones sociales exigen que los CDR se modernicen sin perder sus principios fundamentales, lo cual, a decir de su coordinador nacional, implica un trabajo más profundo en la formación política, la preparación de los cuadros de dirección a todos los niveles, y mayor dinamismo.
En el contexto de estas celebraciones se reconocieron como provincias destacadas en el trabajo de la organización a Santiago de Cuba, Las Tunas y Matanzas, mientras que Ciego de Ávila recibió la condición de Vanguardia Nacional.
Como parte del acto cederista se le otorgó el Premio del Barrio a la Universidad de Ciego de Ávila Máximo Gómez Báez, que desarrolla 36 proyectos comunitarios, 19 de ellos de alto impacto, además de organizar y auspiciar importantes eventos culturales, políticos y otros en beneficio de la comunidad.
La estabilidad en la política de cuadros, la mejora de la labor política ideológica y el cumplimiento de las donaciones voluntarias de sangre resultan algunos de los principales resultados que avalan la condición de Vanguardia, a nivel nacional, otorgada a la provincia de Ciego de Ávila por los CDR.