
«No hay dudas de que el Premio Maestro de Juventudes es una gran responsabilidad que instalo en mi alma, entre temeroso y abrumado. Es probable que todavía no lo merezca. O pudo ser antes, o nunca. Y así lo recibo, con una mezcla de incertidumbres y sorpresas. Quiero que el amor a la Patria, que ha sido mi sostén y abrigo, sea finalmente el resultado de esta alegría que me embarga hoy».
Desde el más sincero agradecimiento, el cantautor Amaury Pérez Vidal habló así en nombre de los distinguidos con ese reconocimiento, el más alto que concede la Asociación Hermanos Saíz (AHS), organización que agrupa a la joven vanguardia artística del país.
Tal lauro, a decir de Yasel Toledo Garnache, presidente de la AHS, nace del profundo respeto y la gratitud hacia aquellos hombres y mujeres de la cultura y el pensamiento que, con su magisterio, obra y ejemplo, constituyen paradigmas para las nuevas generaciones de artistas e intelectuales cubanos.
Fueron protagonistas de la velada, en el Memorial José Martí, de la capital, la investigadora y primera directora del Teatro Nacional de Cuba, Isabel Monal; el fundador y líder de La Colmenita, Tin Cremata; el artista visual y premio nacional de Artes Plásticas, Rafael Zarza; el crítico de cine e historiador, director de la Cinemateca de Cuba, Luciano Castillo; y Fernando Hechavarría, actor, director teatral y profesor.
También resultaron enaltecidos el artista escénico y director del grupo Teatro Andante, Juan González Fife; la escritora y guionista, premio nacional de Literatura, María Elena Llana; Rafael Lay, director de la Orquesta Aragón; y los premios nacionales de Música Mirian Ramos y Roberto Valera.
Sobre ellos, dijo el Presidente de la AHS que, con sus estilos, maneras de ser y dimensiones como seres humanos, son partes esenciales de la cultura cubana, «que es serlo del alma de la nación», refirió.
El emotivo encuentro fue propicio para otorgar la condición de Miembro de Honor de la organización, por su trayectoria y cercanía con la AHS, a la periodista y vicepresidenta de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) Magda Resik; la musicóloga, investigadora y presidenta de la Uneac, Marta Bonet; y el pianista y compositor Roberto Fonseca.
Seguidamente, se hizo entrega, por primera vez, de la Réplica del Monumento de los Hermanos Saíz –que busca homenajear a individuos y grupos creativos con una obra sobresaliente– al primer bailarín y director de la Escuela Nacional de Ballet, Dani Hernández; y al proyecto Oralitura Habana, referente en la promoción de la oralidad, la décima y el punto cubano.
Por las celebraciones del aniversario de la Asociación –próxima a cumplir cuatro décadas de fundada– también se instauró la condición Alma AHS, para reconocer a quienes, sin distinción de edad, son ejemplos insignes de creadores. Resultaron así premiados el pianista y profesor Juan Manuel Piñera y la trovadora Marta Campos.
Asistieron a la cita el ministro de Cultura, Alpidio Alonso, acompañado por la viceministra Lizette Martínez; el presidente de la Casa de las Américas, Abel Prieto; los premios nacionales de Artes Plásticas y Literatura, Lesbia Vent Dumois y Miguel Barnet, respectivamente; así como funcionarios del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, la Unión de Jóvenes Comunistas y otras instituciones.