
Con un acto en el hogar materno Mariana Grajales, de Bayamo, devenido taller educativo, concluyó, en la suroriental provincia cubana de Granma, la Semana mundial de lactancia materna, iniciada el pasado día primero.
Esta 25 edición de la Semana estuvo presidida por el lema Construyendo alianzas para proteger la lactancia materna: por un bien común, sin conflictos de interés, y persiguió el objetivo de concienciar a la población de los múltiples beneficios y ventajas para el bebé de alimentarse exclusivamente con leche de su mamá.
Durante el acto interactuaron médicos, enfermeras, especialistas de Educación para la Salud y dirigentes de la Federación de Mujeres Cubanas en el municipio de Bayamo y la provincia, con las embarazadas del referido hogar, quienes respondieron interrogantes, ofrecieron criterios personales respecto al asunto y recibieron un plegable educativo.
La Doctora María Cristina Cedeño, coordinadora provincial de Lactancia materna y del banco de leche humana Miel para la vida, dijo a los medios de prensa locales que durante la Semana se realizaron visitas a hogares maternos y promoción del tema en las salas de puerperio, perinatología y piel a piel, porque el objetivo es que conozcan de esa importancia.
“Todo lo que se haga es insuficiente, -enfatiza- debemos seguir orientando y ayudando, queremos lograr que las madres y la familia sean capaces de apoyar esa lactancia materna, pues está demostrado su valía, los niños enferman menos y tienen mejor calidad de vida cuando se alimentan con leche materna.
“Granma ha mejorado los porciento de ganancia en cuanto al niño alimentado hasta los seis meses, y en eso ha influido la existencia de enfermeras coordinadoras del banco de leche, en todos los policlínicos, las que visitan las madres egresadas del hospital, y los consultorios para detectar los pequeños hasta los seis meses, y poder confirmar que están siendo lactados.
“En el primer semestre de este año se lograron recolectar con el aporte de las madres de las áreas 90 litros de leche materna, cifra superior a la de igual etapa de 2016, cuando sumaron casi 60 litros, para el punto de almacenamiento definitivo y procesamiento en el banco de leche humana Miel para la Vida, concluye”.