Granma ha incorporado entre sus prioridades de trabajo para el segundo semestre, el fortalecimiento de la producción local de materiales de la construcción, objetivo imprescindible para adelantar en el programa de construcción de viviendas subsidiadas para personas naturales con bajos ingresos.

Entre las medidas de mayor importancia, el Consejo de la Administración provincial decidió especializar en esa producción a la Empresa de Conservación, Rehabilitación y Servicio a la Vivienda.

Para su nueva encomienda, la entidad granmense se ha beneficiado con la entrada de 18 molinos de martillo para la producción de áridos finos, con alcance para todos los municipios, los que logran una capacidad de producción por esa vía, de no menos de 240 metros cúbicos mensuales del material.

Cinco localidades, además, cuentan con un molino de mandíbula para producir áridos gruesos, en tanto Bayamo, capital provincial, espera recibir otros seis, mediante de proyecto de colaboración, para utilizarlos, también en el reciclaje de escombros.

Impactarán en la actividad, asimismo, la entrada de tres hormigoneras, cubos de albañilería, palas, vagones, materiales para la fabricación de moldes para tanques y bloques, medios de protección y otros útiles.

Se ha logrado, a la vez, una mayor inserción del sector no estatal a la producción, se rescataron carpinterías en desuso, y se instrumentó un nuevo sistema de evaluación de la calidad de los productos terminados.