
Mil 118 habitantes de nueve comunidades de Buey Arriba, suministrados con la distribución de agua en pipas, se encuentran hoy afectados, expresó Alberto Villariño Páez, jefe de operaciones de Acueducto y Alcantarillado de este serrano municipio.
Añadió que de los tres carros cisternas destinados para esta actividad, dos se encuentran paralizados, por lo que se adoptan estrategias con tractores asociados a las Cooperativa de Crédito y Servicio del territorio para potenciar el vital recurso sobre ruedas.
Criticó el transporte privado los cuales se benefician de la complejidad del asunto.
“Los particulares resuelven parte del problema, pero crea otro en el bolsillo de los clientes. Un tiro de agua por la gestión no estatal está costando más de mil 500 pesos”, manifestó.
Apuntó que en la cabecera del municipio siete mil 814 habitantes reciben el abasto por la red hidráulica, los cuales son afectados en la distribución del líquido cada 15 días.
“Aunque tenemos dos pipas, una de ellas de Acueducto provincial, realizando la importante actividad en el centro de la ciudad en los días que falta el suministro por tuberías, aun es insuficiente porque priorizamos, además, las entidades de servicios y objetivos económicos, lo que nos dificulta llegar a todos los clientes”, enfatizó.
Señaló de compleja la situación hidráulica en la comunidad Virey, donde los lugareños buscan alternativas de solución con carretones para autoabastecerse hasta tanto se acometa un proyecto de inversión que se viene gestando por Recursos Hidráulicos Granma.
Aseveró que el municipio se beneficiará en lo adelante con la incorporación del cambio de matriz energética en tres estaciones de bombeo que se encuentran en las comunidades San Rafael, San Pablo de Yao y Maguaro, respectivamente.