El tránsito de Cuba por el V Clásico mundial de béisbol (CMB) apenas reservó tiempo y espacio en estas páginas para los Alazanes de Granma y su alistamiento rumbo a la 62 serie nacional, que arrancará el próximo miércoles.

Y en medio de tantas sensaciones positivas que dejaron los cubanos en el magno evento de las bolas y los strike, el equipo granmense -como el resto de sus similares del país- ya da los toques finales a la preparación.

A pesar de algunas ausencias sensibles, no habrá otra alternativa, que defender hasta las últimas consecuencias su condición de campeón, como lo han expresado varios jugadores y la dirección, encabezada ahora por el debutante Leonardo Soto Agüero.

Difícil reto para el timonel, que durante varias campañas bebió de la savia de Carlos Martí Santos, mientras lo acompañaba en el banquillo de los Alazanes. De hecho, así lo reconoció, cuando fue anunciado en el puesto de mando, el pasado 1 de este mes.

De todas formas, Soto Agüero contará con un colectivo técnico experimentado y que no ha sufrido muchas bajas con relación a las temporadas más recientes, aunque la deserción de Iván Prieto González, receptor de bullpen en el CMB, deja una vacante difícil de cubrir.

Esa será, sin duda, la ausencia más sentida que enfrentarán los monarcas, sobre todo, porque la receptoría es determinante en el juego de béisbol y se necesita tiempo para formar a los defensores de esa posición.

Asimismo, la convocatoria del inicialista Guillermo Avilés Difurnó para el entrenamiento de primavera con los Piratas de Campeche, de la Liga mexicana, también debilita el núcleo de la alineación, al tiempo que la ofensiva pierde poder.

Ahí radican las principales carencias de los campeones, por lo que los derechos César García Rondón y Yoel Mojena Machado, junto al zurdo Leandro Martínez Figueredo, al frente del cuerpo de lanzadores, deberán asumir protagonismo en busca de la clasificación, objetivo inicial del plantel.

Solo queda esperar por la voz de A jugar, que se dará el día 29, en el estadio Mártires de Barbados, donde los Alazanes volverán a recibir a Matanzas, su víctima en la discusión de la corona de las dos ediciones anteriores.