
Aunque el heredero al trono del Reino Unido y su esposa no representaron una visita gubernamental, su llegada fue considerada por Londres y La Habana una oportunidad para estrechar sus vínculos, impulsados a partir de la presencia aquí en 2016 del entonces secretario de Estado para Relaciones Exteriores, Philip Hammond (actual ministro de Hacienda) y la reciente visita de tránsito al país europeo del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel.
Díaz-Canel recibió en la noche del lunes al príncipe Carlos en el Palacio de la Revolución, donde intercambiaron criterios acerca del estado de los nexos bilaterales, basados en la cooperación y el respeto mutuo.

Rodríguez también conversó por teléfono con el secretario de Estado para las Relaciones Exteriores del Reino Unido, Jeremy Hunt, en el marco de la primera visita oficial a la mayor de las Antillas de miembros de la realeza británica.
Otro acercamiento a nivel de gobierno tuvo lugar entre el director general de Asuntos Bilaterales de la cancillería cubana, Emilio Lozada, y el director de las Américas del Ministerio de Asuntos Exteriores y de la Mancomunidad, Hugo Shorter.
INTENSA AGENDA
El príncipe de Gales y la duquesa de Cornualles cumplieron una intensa agenda en la isla desde su misma llegada, el pasado domingo, cuando rindieron homenaje al héroe nacional de Cuba, José Martí, en el memorial que recuerda al prócer, en la Plaza de la Revolución.
Sus altezas, acompañadas por el historiador de La Habana, Eusebio Leal, recorrieron el lunes zonas del casco histórico de esta capital, declarado en 1982 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Durante su estancia en esa parte de la ciudad, develaron una estatua que evoca al dramaturgo y poeta inglés William Shakespeare y apreciaron una tarja a propósito de su estancia en la mayor de las Antillas que recuerda la presencia de tropas británicas en la capital cubana en 1762, bajo el reinado de Jorge III.
La visita incluyó además la asistencia a una gala artística, a un popular parque habanero, donde conversaron con integrantes de la comunidad británica y con miembros del club de motocicletas y autos clásicos ingleses, y al Centro de Inmunología Molecular, una de las instituciones más importantes de las investigaciones médicas de la nación caribeña.


El proyecto es ejecutado por la empresa Mariel Solar S.A., corporación del Reino Unido con una filial ciento por ciento cubana y, en materia de contribución energética, representa el primero de gran escala en Cuba y el más grande de la región, informó el director de la entidad, Andrew McDonald.
A propósito de esta actividad, el ministro anfitrión de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, refirió que en la actualidad se abre un nuevo momento en las relaciones bilaterales que, con la concreción de proyectos como el citado, deberán elevar el bienestar del pueblo y contribuir al desarrollo de la economía doméstica.
Por su parte, el embajador del Reino Unido en la isla, Anthony Stokes, ponderó el avance de la primera bioeléctrica que se construye en Cuba por la empresa Biopower S.A, consorcio con capital cubano y británico, cuyo objetivo consiste en la generación de energía eléctrica a partir de la biomasa vegetal.
Durante la visita, la duquesa Camila de Cornualles sostuvo un encuentro con la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), en el que abordó cuestiones relacionadas con la igualdad de las féminas y el combate a la violencia de género.
La secretaria general de la organización, Teresa Amarelle, le explicó sobre el objetivo social de la FMC, que juega un papel preponderante en cuanto a igualdad de género y representa a más de cuatro millones de mujeres en la isla.