Con la reciente inauguración de dos casitas infantiles en los municipios de Jiguaní y Bartolomé Masó, la oriental provincia de Granma elevó el número de esas instituciones educativas.
Los nuevos locales pertenecen a las respectivas direcciones municipales de Educación, declaró en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias Carmen Domínguez Viamonte, metodóloga de la Primera Infancia en la Dirección Provincial del sector.

Explicó que “Amanecer Feliz”, en la primera localidad mencionada, tiene capacidad para 30 niños, mientras “Estrellitas del Turquino” puede beneficiar hasta 40 hijos de madres y familias trabajadores de Bartolomé Masó.

Ambos inmuebles, dijo, comenzaron a prestar servicios con matrículas más bajas, pero estas serán completadas para el inicio del próximo curso escolar 2025-2026, en septiembre venidero.

Con el propósito de continuar sumando capacidades frente a la demanda insatisfecha de cupos en círculos infantiles, actualmente se avanza en el acondicionamiento de otros cuatro espacios: uno de Salud Pública, en el costero municipio de Manzanillo; y tres en Bayamo, a cargo de Educación, la Empresa Eléctrica y Comercio Interior, informó Domínguez Viamonte.

Agregó que la División Territorial de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A., también en la capital provincial, invierte en una obra nueva, ahora en fase constructiva.

Según establece la Resolución 58/2021 del Ministerio de Educación de Cuba, la casita infantil funciona como una variante de atención educativa, en la modalidad institucional de la Primera Infancia.

La misma presta servicios a entidades que, a partir de condiciones económicas y materiales propios, puedan destinar fondos para su apertura, mantenimiento y garantía de sostenibilidad; mientras el sistema educacional asigna el personal especializado para la atención a los pequeños.