
Cada lunes y jueves, miembros del Consejo provincial de distribución y suministradores de todos los sectores, intercambian con sus homólogos de los municipios, mediante el sistema de audioconferencia, con el propósito de llevar al nivel del más mínimo detalle, y lo más acertadamente posible, el abastecimiento de productos, a pesar de las limitaciones que se presentan con algunos de estos.
El intercambio apunta a las existencias, de manera que la distribución hacia las localidades sea equitativa, también a la búsqueda de soluciones operativas ante posibles inconvenientes, y a la adopción de acuerdos para que ese proceso, sensible y de gran impacto popular, transite de manera lineal.

Esta semana, Harold Pérez Teira, vicepresidente del Consejo de la Administración que atiende la referida actividad, puntualizó que las bajas coberturas conciernen en lo fundamental, a la harina de trigo, fósforos, desodorantes y frazadas para piso, algunas por limitaciones productivas, y otras porque por problemas de financiamiento el producto no pudo entrar al país en la fecha prevista.
A pesar de lo anterior, informó se aplican variantes y estrategias internas como sucede ante el déficit de soya y MDM (masa deshuesada mecánicamente que obligan a sustituir en el sector de la gastronomía las hamburguesas y perros calientes por masa de salchichón y hamburguesas, por citar un ejemplo).
UNOS FALTAN, OTROS AUMENTAN
El más interesante de los anuncios hechos en los encuentros de distribución de esta semana, fue sin dudas la puesta en marcha desde el 24 de septiembre y hasta diciembre, de un programa emergente de distribución de productos cárnicos, que presuponen la comercialización diaria en la provincia de 10 toneladas por encima del plan, todo gracias a incrementos de volúmenes productivos del sector agropecuario.
De ese volumen, alrededor del 50 por ciento es carne de cerdo propiamente y el resto subproductos que se ofertarán de forma liberada en las unidades del comercio.
Los establecimientos cárnicos de Bayamo, Manzanillo y Niquero se encargarán del procesamiento diario, a razón de cinco, tres y dos toneladas, en ese orden, y desde ahí, se trasladará elalimento a las localidades correspondientes, a donde llegarán después del mediodía.
Bayamo abastecerá además a Río Cauto (lunes), Cauto Cristo (martes), Jiguaní (miércoles), Buey Arriba (jueves) y Guisa (viernes). Niquero que comercializará tales productos allí mismo los lunes y jueves, abastecerá también a Pilón (miércoles y sábado) y Media Luna (martes y viernes).
En el caso de Manzanillo, tendrá el encargo de distribuir lunes y jueves en Yara, martes y viernes en Campechuela, y miércoles y sábado en Bartolomé Masó.
EVITAR EL ACAPARAMIENTO
El sistema general de distribución que se lleva a cabo en el territorio, no solo tiene entre sus propósitos la ampliación de las coberturas de productos, su repartimiento equitativo y adecuado, sino también en enfrentamiento tenaz a toda manifestación de acaparamiento y reventa.
En ese sentido Pérez Teira, reiteró esta semana que es responsabilidad de las estructuras de dirección de las unidades comercializadoras, permanecer en estas durante todo el horario de servicio, y velar porque las ventas trasciendan de manera adecuada, y no se produzcan por ningún concepto acaparamientos.
En fin, se multiplicará la exigencia con quienes pretendan aprovecharse de los déficits temporales de cualquier producto, para lucrar sin importarle el prójimo.