
Seis torres de alta tensión yacen derribadas sobre el terreno abrupto de Dos Ríos, en el municipio de Jiguaní. Doce toneladas de acero cada una, vencidas por vientos que superaron los 250 kilómetros por hora durante el paso del huracán Melissa.
Como gigantes caídos, aguardan ahora las manos de los hombres y mujeres de la Empresa de Construcción para la Industria Eléctrica Minem (ECIE), quienes enfrentan la titánica tarea de devolverlas a la vida.
El contingente de 110 trabajadores, distribuidos en ocho brigadas de línea y dos de montaje, tiene una misión clara: restablecer la conexión de Granma al Sistema Electroenergético Nacional (SEN) a través de las líneas de 220 kV, pero la naturaleza se resiste.

El terreno inhóspito impide el paso de las maquinarias necesarias para alzar las nueve torres de emergencia de 39 metros de altura que, como primera etapa, rehabilitarán la línea Cueto-Bayamo. En condiciones normales, una brigada puede ensamblar de tres a cuatro torres por día, pero aquí nada es normal.
Después vendrá la fase definitiva: construir las torres permanentes de acero galvanizado, estructuras de 42 metros de altura compuestas por mil 200 elementos cada una. Estos colosos metálicos energizarán la línea de transmisión y alimentarán la Subestación de 220 kV en Bayamo.
Las jornadas comienzan a las 5:00 de la mañana. A veces sin electricidad ni agua corriente, los trabajadores enfrentan condiciones que pondrían a prueba a cualquiera. Sin embargo, el compromiso permanece intacto. Los impulsa algo más profundo que el deber: una voluntad férrea y una perseverancia que define a esta organización, vanguardia de la Unión Eléctrica y pilar fundamental del sector electroenergético del país.
En tanto, la recuperación eléctrica no se detiene en otros frentes. El día de ayer se logró recuperar servicio eléctrico a 220 mil 905 clientes, para un 78.24 % en la provincia y se logró la sincronización de la provincia de Granma al Sistema Electroenergético Nacional por la doble línea 110 Kv Contramaestre-Bayamo, obteniendo 50 MW a las 18:27.
Entre las acciones destacadas, se logró energizar la línea 5595 de 33 kV en Río Cauto, lo que permitió restablecer el servicio en la zona de distribución de Cayama y se normalizó el suministro en los circuitos de Mabay, La Unión, Monjará, Pilón, Niquero y Manuel Fajardo del municipio de Cauto Cristo.
Mientras las torres esperan su resurrección, las brigadas avanzan. Paso a paso, estructura a estructura, recuperando no solo la energía de una provincia, sino también la esperanza de miles de familias granmenses que aguardan en la oscuridad por más 11 días. Por estos caminos de gigantes, transita el esfuerzo de quienes a veces desde el anonimato trabajan por la eterna vocación de amar a un país y serle útil.
