
Uno de los jugadores más pimentosos y entregados de las últimas temporadas con selecciones de Granma, Osvaldo Abreu, se mostró optimista para la reanudación, este martes, del play off de cuartos de final frente a Matanzas, en la 63 Serie Nacional de Béisbol.
“El equipo tiene fuerzas para seguir luchando”, confirmó al colega de Radio Rebelde, Guillermo Rodríguez, instantes después de concluido el segundo choque, en el estadio Mártires de Barbados, de Bayamo.
“Habrá pelea y aún podemos ganar”, agregó el antesalista yarense, a sabiendas del tremendo reto que enfrentará junto a sus compañeros, luego del par de reveses sufridos en sus predios, el fin de semana anterior.
Más allá del impensado desenlace, la ineficiencia del pitcheo relevo, la escasa ofensiva y el nulo aporte de figuras importantes fueron, sin duda, los puntos más bajos del conjunto.
Sorprende que Alfredo Despaigne y Guillermo Avilés, tercero y cuarto bates, aún no hayan marcado en el casillero de indiscutibles ni en el de carreras impulsadas. Sin la contribución de ellos, no se puede aspirar a mucho.
De hecho, los alumnos de Ángel Ortega exhiben average de .235 (77-16), el tercero más discreto entre los ocho elencos involucrados en la postemporada, un rendimiento criticable porque encabezaron ese departamento colectivo en la etapa clasificatoria.
El panorama parece más complicado porque las principales cartas de triunfo, César García y Leandro Martínez, salieron derrotados. Ambos caminaron los encuentros, pero no contaron con apoyo ofensivo.
Ahora, la enorme responsabilidad de conducir el staff recae sobre los jóvenes Sammy Benítez y Lismay Ferrales, y el zurdo Yunier Castillo, probables abridores, a partir de hoy, en el parque Victoria de Girón.
Los alumnos de Ángel Ortega necesitan arrancarles -al menos-dos éxitos a los Cocodrilos. Solo así, podrían regresar a sus predios y seguir en la batalla por el campeonato.