
Cuatro años tal vez ha sido poco tiempo para la balonmanista Gleinys Reyes González en el Zonzamas Plus Car Lanzarote. Aún se siente en deuda con el club que le abrió las puertas en el 2021.
Desde entonces, no ha parado de anotar goles. Y aunque parezcan asombrosos los más de 600, esa cifra ofrece una medida más exacta de su calidad como jugadora y de lo que ha representado para el equipo.
De hecho, cuando debutó en España (2021/2022), lo hizo al más alto nivel porque el Lanzarote ascendía a la Liga Guerreras Iberdrola y, en esa temporada, estampó 141 tantos, para ubicarse tercera entre las primeras artilleras de todo el circuito.
Ni con el descenso a la División de Honor Oro, a partir de la próxima campaña, la extremo derecho flaqueó, por el contrario, continuó haciendo lo que mejor sabe hacer, hasta consolidarse como el principal referente ofensivo del conjunto.
A propósito de su paso exitoso por aquella región de Islas Canarias y de su aporte decisivo en el regreso del elenco a la máxima categoría del balonmano español, La Demajagua conversó con la zurda de Campechuela.
-Con más de 600 goles en cuatro temporadas, se ha convertido en la principal artillera de su elenco, ¿lo esperaba?
-Me entrego al máximo cada día, con mucha disciplina, dedicación y trabajo. La verdad es que soy muy exigente conmigo misma.
-Acaban de ganar en la División de Honor Oro y ascender a la Liga Guerreras Iberdrola, ¿se sintió protagonista de ese resultado?
-Ascender era nuestro objetivo y lo logramos con el esfuerzo de cada jugadora, el colectivo técnico y el apoyo de la afición.
“Fui pieza clave para conseguir ese objetivo y estoy muy contenta por este resultado. Esperemos que nos mantengamos por un largo tiempo”.
-Al decir del técnico Juan Rivera, asumes un liderazgo natural dentro del grupo, por tu ejemplo, constancia y profesionalidad
-Él confía plenamente en mí, por todo mi trabajo como persona y como atleta, de lo que estoy y siempre le estaré agradecida.
-¿Han llegado propuestas de otros clubes y ligas?
-Sí, propuestas siempre tengo; pero estoy muy bien en mi equipo y no he pensado irme para ningún otro sitio.
–Cuba regresará a un Mundial, tras imponerse convincentemente en el clasificatorio de Norca, en México, ¿con qué expectativas llegarás a ese certamen?
-Clasificarnos es un mérito y un logro que muchos esperaban, pero no resultó fácil. Iremos con mente positiva y con los deseos de hacer un buen papel, aunque será bastante complicado, pues los restantes equipos han aumentado muchísimo el nivel.
“Nosotras tenemos pocas jugadoras contratadas y, además, aquí las condiciones de las instalaciones no son las adecuadas y eso influye un montón.
“Ojalá que se pueda salir con tiempo para establecernos en otro país y realizar una base de entrenamiento”.
-¿Y su gente de Campechuela? ¿Cómo lidia con tantos kilómetros de distancia?
-Mi mamá está aquí en La Habana; es mi eslabón fundamental. Mi familia y amigos siempre están pendientes de mis resultados y no dejan de apoyarme, aunque sea en la distancia.
“A todos les agradezco muchísimo, por estar siempre conmigo tanto en los momentos buenos como malos”.