
Los primeros tres meses de 2024 han sido muy satisfactorios para la Fábrica de Conservas Yara, en cuyos resultados ha influido la actual zafra de tomate, que se espera dure hasta el día 15 del presente mes.
Una muestra del buen trabajo es que, de un plan de dos mil 175 toneladas de tomate, hasta el 4 de abril había procesado dos mil 357, lo que puede incrementarse, porque la campaña no ha concluido.
En declaraciones a La Demajagua, Juan Franklin Almirall Rodríguez, director de la entidad, explicó que, para garantizar la molida del tomate, en la etapa pico, se estableció una estrategia de tres turnos en 22 horas consecutivas, con dos destinadas a la limpieza de los equipos.
“Se recepcionó tomate de productores de La Sal y Veguitas, fundamentalmente, además de las cooperativas 28 de Enero, Frank País, Felipe Frías, José Arteaga y Antonio Maceo. Ahora recibimos la materia prima de Cauto Cristo y de Holguín.
“Las variedades que más utilizamos son el tomate PR, el Perita y el León, los cuales tienen un buen rendimiento”.
El plan de producción del trimestre era de 276 toneladas de frutas, vegetales y tomates, y el real fue 817, 9, para un 296,4 por ciento.
En el ámbito físico-mercantil, estaban previstas 276 toneladas y se produjeron 463,2, para un 177,8 por ciento, gracias a la entrada de una asignación de azúcar que permitió hacer 186 toneladas de conservas de frutas, 258,6 de tomate y 11,7 de vegetales.
Otro aspecto relevante en lo que va de año es el rendimiento industrial de 106,4 por ciento, lo cual evidencia el buen quehacer del colectivo.
Un añejo problema de la fábrica era el de los envases, prácticamente, se resolvió gracias al encadenamiento productivo con la empresa Evolución, de La Habana, y con otra radicada en Holguín, las que garantizan envase de aluminio para las diferentes producciones, sobre todo las de pequeño formato.
Como consecuencia del buen quehacer en los meses de enero, febrero y marzo, la fábrica obtuvo 74 millones de pesos en moneda nacional por concepto de ventas, lo que representa el 172 por ciento del plan. La cifra incluye alrededor de nueve millones de pesos en utilidades que se comparten con el resto del personal de la Empresa de Conservas y Vegetales Granma (ECVG).

Tener autonomía económica constituye un viejo anhelo de los conserveros yarenses, pues en ellos y su industria recae el mayor peso productivo de la ECVG. Un ejemplo expuesto por Almirall Rodríguez, es que en el 2023 aportaron alrededor del 85 por ciento de los ingresos de la ECVG , y en lo que va de 2024 han generado casi el 100 por ciento.
Entre las noticias alentadoras sobresale la entrada de 11 contenedores con envases de aluminio de 330 mililitros, para el néctar Taoro, que es el producto insignia de la fábrica y se elaborará con sabores de guayaba, piña, tomate y mango. Tiene como destino la exportación y la captación de divisas para el desarrollo de esta industria.
Cercana ya la campaña de mango, se le da mantenimiento a la línea de jugos, pues prevén producir alrededor de 400 toneladas de néctar de esa fruta, las cuales están contratadas con Rusia y México, como principales clientes.

La ausencia de tanques y bolsas asépticas que debe suministrar la empresa provincial para envasar la pulpa de mango, puede hacer peligrar las buenas intenciones de aprovechar al máximo el tiempo de cosecha de la fruta.
Con respecto a la producción para el comercio mayorista, la fábrica está centrada en la elaboración de jugos de frutas naturales en botellas de 250 y 350 mililitros, mermelada a granel de frutas, salsa manzanillera, encurtidos de vegetales a granel y envasados en bolsas y pomos de un kilogramo, además de pasta de tomate comercializada en formatos similares.
Entre logros, anhelos y desafíos marcha a buen ritmo la fábrica de conservas Yara, que en gran medida debe las proezas a su excelente colectivo, y al trabajo loable de los aniristas, quienes mantienen funcionando equipos de 1917 y 1932, lo cual dice mucho del amor y la entrega en una entidad dulcemente empeñada en deleitar el paladar de cubanos y extranjeros.