
Vigorosa y saludable, arriba a su cumpleaños 40 la cooperativa de producción agropecuaria (CPA) Jesús Menéndez Larrondo, de Santa Rosa, zona rural de Campechuela.
“Nació” el 10 de mayo de 1982, con el encargo de producir caña de azúcar para ser molida en el central Enidio Díaz Machado, de Ceiba Hueca, en el mencionado costero municipio granmense.
A partir de entonces y hasta ahora, ha materializado los planes de producción y mantenido una buena salud financiera.
“Nuestra cooperativa nunca ha sido una carga para el Estado ni hemos tenido que negociar deudas, ni dejado de pagar un centavo en una quincena a los cooperativistas, ni pensamos caer en esa situación, porque para eso estamos trabajando y produciendo”, dice el presidente de su Junta Directiva (JD) desde 1989, Benedicto Labrada Peña.
Estar completa la JD de la entidad, contar con una buena económica y trabajar en equipo, “hacen posible los resultados que poco a poco alcanzamos y vamos por más”, añade Benedicto.
En estos momentos la CPA mencionada tiene 85 cooperativistas más dos asociados, y un fondo de tierra superior a las 500 hectáreas, en parte de las cuales, al momento de realizar este reportaje, eran cortadas cientos de toneladas de caña, convertidas luego en azúcar.
Sus compromisos de cantidades de la gramínea a entregar en las zafras azucareras, los sobrecumple, debido a las atenciones culturales dadas a las plantaciones, todas en áreas de secano.
Para la campaña de molida 2021-2022 programó tributar a la industria seis mil 430 toneladas de materia prima, superadas con más de 800 toneladas.
**********
Al decir que su CPA va por más, Benedicto se refiere en particular a la proyección de aumentar las producciones destinadas al autoabastecimiento.
En tal sentido, la cría de cerdos de capa oscura es una prioridad. En la actualidad cuenta con 81 ejemplares, de estos 14 reproductoras. También, construir una cochiquera rústica para un centenar de animales de otras razas de más rápido crecimiento, pero más exigentes en cuanto a alimentación.
El módulo pecuario de la cooperativa cuenta, además, con más de un centenar de conejos, 50 ovejos, patos, gallinas y pavos.
Las carnes de esos animales están destinadas a los comedores obreros,-dos móviles en tiempo de corte de caña, más uno permanente- y venta a los cooperativistas, a quienes se suman mil 280 residentes en Santa Rosa y Palmarito. A unos y otros se les oferta, asimismo, arroz, viandas y granos.
Rosas y otras flores, no obstante la sequía, y una CPA que se apresta a celebrar su cuadragésimo cumpleaños por todo lo alto en cuanto a resultados económicos, hay en Santa Rosa.