
Los productores de café en las montañas de Guisa, dan pasos pequeños pero firmes en el programa de reenfoque perspectivo cafetalero hasta 2020, tanto mediante la creación de microviveros como en la ampliación de nuevas áreas.
En la primera modalidad el productor evita comprar posturas, trasladarlas a grandes distancias con el consiguiente daño y por otra parte beneficia su economía particular y la de su base productiva puntualiza Roberto Ibarra Almarales, presidente de la cooperativa de créditos y servicios (ccs) Manuel Fajardo, la más productiva del Bombón, inserta en una demarcación de unos 46 kilómetros cuadrados.
El microvivero de Luis Fontanes, asociado a esa cooperativa permite plantar más de cuatro hectáreas en la parte alta de su finca y según Oniria Richard Lossí, técnica integral de montaña en esa región, la postura no se daña en el traslado sino que goza de mayor fortaleza y probabilidad de supervivencia.
Fontanes asevera que cuando la matica tiene siete pares de hojas y los huecos están dispuestos con materia orgánica en el área seleccionada, ya es el momento para la siembra, después el clima y los cuidados permanentes se encargan del resto.
En el reenfoque cafetalero la ccs tiene un plan de 12 hectáreas para el presente año, de las cuales ya tiene cubiertas 11, pero seguimos sembrando, expresa Ibarra Almarales
Otros microviveros como el de Vega Grande, en el propio territorio de Guisa cuenta con 16 mil matas de café y la experiencia, con ventajas demostradas sigue extendiéndose por los municipios montañosos de Granma.