
La transmisión radial es realmente demasiado importante para dejarla solo en manos de los locutores, por eso hoy comparto la historia de Hugo Emilio Pérez Sanz, radialista niqueeño que, frisando las más de tres décadas de profesión, se desempeña como especialista en Propaganda, de Radio Rebelde.
-Mis padres, Florencia y Hugo, (ya fallecidos) me concibieron en Niquero, aunque nací en el materno Fe del Valle, de Manzanillo, el 23 de agosto de 1967, y aunque ellos no fueron grandes intelectuales, disfrutaban el arte plenamente, mediante los programas radiales y televisivos.
-¿Ese ambiente hogareño influyó en su pasión por la radio?
-De niño amplificaba música en la calle, junto a otros muchachos de la cuadra, hasta que en 1985, mi amigo Julio Vega, director de Portada Visión, me presentó a Odalis Matamoro, máxima autoridad de la Casa de cultura, quien me incorporó a la radiobase Siempre es 26, en el séptimo mes del referido año.
“En ese período, matriculé la Licenciatura en Educación, especialidad de Matemáticas, en el Pedagógico Blas Roca, de Manzanillo, y los fines de semana, de regreso al terruño, me iba a la radiobase, junto a Alberto Solis, a Elio Pacheco y a Luis Coterón.
“Alrededor de 1990 se organizaba los preparativos de un estudio de radio. Egresé de mi carrera universitaria, cumplí con el Servicio Social y me integré a la plantilla inicial de Radio Portada de la Libertad, el 18 de septiembre de 1993.
“Fui el primer realizador de grabaciones, ediciones y transmisores de la emisora. Tenía la responsabilidad de toda la programación, grabada y en vivo, de 3:00 de la tarde a 7:00 de la noche.Imagínate”.
-¿Qué le representó ese medio?
-La gran escuela en la que realicé mis sueños. Allí conocí a muchas personas que me ayudaron en el desempeño de mi trabajo: Ramón La Rosa, Olguita Sam, Gislania Tamayo, René Galera, Alberto Milanés, Ernesto Martínez, Julio Jurado, José Luis García, Ramón Suárez…
“Estuve 24 años en la radio niquereña, en programas informativos, dramatizados, musicales, variados… que me parecen 60, la amo tanto que no tengo horario, ni descanso, todo un entrenamiento que me sirvió para el desempeño actual en la capital cubana”.
-¿Por qué La Habana?
-Llegué a esta gran urbe en el 2018, jamás pensé en esa decisión. Estaba casado con una muchacha de Pilón que estudiaba Filología, en Santiago de Cuba, y al culminar la ubicaron en La Habana, a cumplir el Servicio Social y me fui tras ella.
“Mi hermana ya vivía en la capital y como apenas tenía familia en Niquero, decidí por el traslado”.
-¿Y Radio Rebelde?
-Realizaba trámites de mi vivienda y en contacto con mi amiga Carmen Vieito, quien trabajó en Niquero como asesora, comentó que Rebelde tenía una plaza de Propaganda que hacía cinco años no se cubría. Habló con el jefe de Programación, Orestes Torres Aleaga, aceptó la propuesta, envié mi currículo y el 1 de febrero de 2018 comencé como especialista en Propaganda.
“De forma paralela trabajé como director de series radiales, pues me había evaluado antes. En estos momentos, tengo a mi cargo, además, la revista A esta hora, que sale a las 3:30 a.m., del lunes, la cartelera y el programa Diálogo diferente, con frecuencia dominical, a las 5:45 de la tarde, que me consume mucho tiempo”.
-¿Mensaje?
-Siempre pienso en mi provincia, dispuesto a ayudar. Cada vez que puedo envío trabajos a Radio Portada, a Radio Granma y a Radio Bayamo. No me olvido de ellas y las recuerdo con mucho cariño. A todas ellas y a sus oyentes, muchas felicidades por el nuevo año.