Con el propósito de lograr mayor eficiencia e incrementar la capacidad productiva, la Empresa de productos lácteos de Granma (Granlac) se ejecuta  inversiones en distintas líneas de producción, instalaciones de recepción, neveras, potencialidad de almacenamiento de materia prima a la par que modernizan la tecnología de las comunicaciones.

A la década de 1930 se remonta la puesta en marcha de la industria láctea en la región de Bayamo, asegurada por la cuenca lechera que provee la ganadería vacuna abundante en aquella época y que ha ido en detrimento.

Muchos años de explotación intensa han deteriorado varias líneas productivas, sistemas de enfriamiento, mientras el crecimiento de la demanda y la necesidad de diversificar también imponen retos empresariales.

El ingeniero Luis Virelles Barreda, director general de Granlac explica la recuperación de diversas instalaciones, entre ellas neveras para el producto terminado, y el local de acopio de leche, preparándose para el incremento productivo que se prevé con el aumento de la producción de leche a la que se estimula al sector cooperativo y campesino que tributan a la industria.

Se trabaja a la par en la modernización de la tecnología de comunicación, pues la empresa tiene varias unidades empresariales de base, cuatro en Bayamo y otras dos en Manzanillo y Media Luna respectivamente, en las que hace falta supervisar procesos, dar seguimiento a decisiones y conocer a diario el funcionamiento.

Uno de los logros y aciertos recientes de la industria láctea en Granma es poner en la mesa del cubano otro alimento rico en proteínas y calorías, altamente digestivo y beneficioso para la salud como el Miragurt, que se produce a base de suero, maicena, saborizante y estabilizadores.

El producto tiene aceptación entre los consumidores y según ha sugerido el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, de visita en Granlac en junio de 2018, la necesidad de extenderlo y fabricarlo en otras industrias del país, empeño que se encuentra encamino de realizarse.

Ante las limitaciones de envases y obsolescencia tecnológica de algunas líneas, se buscan alternativas viables. Uno de los productos más gustados luego de iniciarse la pequeña confitera son los bombones que serán envasados en cajas más adecuadas para la comercialización.

Granlac tiene como producto líder en el mercado nacional a la leche condensada, la que se presenta en diversos sabores y se comercializa en la red de mercados ideales y los que cotizan en CUC.

Entre las producciones exclusivas se encuentran los suplementos dietéticos Materlac y Lactosan, de alto valor proteico para madres gestantes y niños con requerimientos nutricionales especiales. Además se elabora harina lacteada, yogurt y quesos de fibra hilada, semiduro, fundido y con moho azul, este último rescatado recientemente y que forma parte de la tradición quesera de la empresa.

Se suman a estas producciones las distintas variantes del helado, especial, crema y de leche así como el sorbete, fabricado a partir de pulpas de frutas naturales y los productos hechos con la leche de soya, los que complementan la ¨verdadera tentación¨, slogan comercial de Granlac, con la que se apertura una nueva etapa en la producción y comercialización que debe aportar sustanciosos dividendos financieros a la provincia.