Como un día de celebración y de compromiso, fue catalogado en Bartolomé Masó el inicio de la campaña cafetalera 2025 – 2026, cita inaugural que tuvo por sede la zona de Santana de Nagua, una de las más sobresalientes al término de la contienda anterior.

El objetivo supremo del actual curso productivo es superar las 0.20 toneladas de café oro por hectárea, precisó en su intervención la ingeniera Noelsis Enrique Benítez, Directora General de la Empresa Agroforestal masoense.

“Ello se traduce en un plan de acopio de 177.03 toneladas, un incremento de más de 66 respecto a la campaña precedente”.

La naturaleza nos ha dado señales alentadoras, señaló la dirigente, así lo indican las floraciones, tanto en las variedades del arábico como las del robusta, pero eso por sí solo no garantiza una buena cosecha.

“Por lo que hemos venido realizando un meticuloso trabajo de preparación, ya completamos el emplantillamiento de la fuerza recolectora y demás trabajadores de la industria y contamos además con varios recursos indispensables, entre los que se incluyen sacos, morrales y animales de carga”.

“Estamos comprometidos y en condiciones de operar de manera óptima en cada pico de maduración y con ello concretar una exitosa cosecha”.

Por su parte Yamicel Cabrales de la Paz, en representación de los productores del campo, expresó la voluntad de trabajar con inteligencia y pasión, aprovechando cada minuto de luz y cuidando bien de cada recurso, “porque cada grano de café que brote de nuestras manos es un tributo a nuestra Revolución y a sus incansables sueños de lucha, unidad y justicia social”.

Durante el acto se aprovechó para efectuar el abanderamiento de las Brigadas Milenarias, las que apoyarán la recogida durante los picos productivos que puedan darse en el periodo de cosecha.

La actual contienda cafetalera en Bartolomé Masó se ha dedicado a homenajear a la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, organización campesina cubana que el próximo 17 de mayo estará cumpliendo 65 años de fundada, con la frente en alto y las manos en la tierra