
Tras años difíciles y de ingentes esfuerzos para sacarla del bache en que estuvo sumergida, la Empresa Paquito Rosales, en Veguitas, Yara está de vuelta a la recuperación y retornar a sus mejores resultados económicos y productivos.
En sus tierras comienza, a pesar de las limitaciones con los insumos, ha observarse un despertar con la activación de las máquinas de pivote central para el riego eléctrico, algunos equipos y proyectos de colaboración internacional, junto a otras alternativas como el uso de la tracción animal y los bioproductos en el laboreo agrícola.
Un programa coherente han emprendido para garantizar los volúmenes de alimentos, destinados al autoabastecimiento local y el encadenamiento con los nuevos actores económicos con la varilla bien alta que rebase desde el municipio, las fronteras de la provincia y del país.
Aleccionador es el ejemplo del colectivo de cultivos protegidos y semiprotegidos La Veguita con la exportación de los primeros envíos hacía Canadá de ajíes picantes Chile Habanero y otros aportes al Turismo y a Frutas Selectas Granma.
Esmérida Quesada Vázquez, directora del módulo, dijo que en sus casas sembraron ajíes, tomates, pepinos y otros cultivos con la consagración de su principal recurso, el humano, premiado por el crecimiento en el nivel de eficiencia, aporte económico y estimulo salarial.
Mientras, existe en los colectivos de las Unidades básicas de producción cooperativa (UBPC) Antonio Maceo y El Palmar un derroche de entrega en las atenciones culturales de los sembradíos de frijoles, tomates y maíz, entre otros cultivos bajo riego, además de aprovechar espacios, los denominados realengos, con plantaciones de calabaza, plátano fruta y burro, berenjena, lechuga y col.
Allá encontramos, en unión, a dirigentes, trabajadores agrícolas y usufructuarios de la tierra en plena faena con el compromiso de alcanzar el máximo posible los rendimientos en las cosechas del grano y hortaliza, no obstante las dificultades con el paquete tecnológico y el combustible porque no se han amilanado y cada cual hace lo que le corresponde.
Kendris Gamboa Sariol, director general de la entidad, expresó que están definidas las acciones para la recuperación gradual con el desarrollo de fincas integrales en las cooperativas y la disposición decidida para avanzar del Consejo de Dirección y de sus trabajadores.
Subrayó que se rescatan áreas que no se cultivaban y ejemplificó con la siembra de variedades de elevados rendimientos agrícolas en vianda, hortaliza y granos con tecnologías como el plátano extradenso que posibilitarán crecer y responder a la demanda de la población y la industria en las campañas de tomate, mango y fruta bomba.
Gamboa Sariol puntualizó que la estrategia permitirá desarrollarnos, generar empleos y los recursos financieros para invertir en el desarrollo de la empresa y mejorar la calidad de vida del colectivo y en el entorno.
El desafío es grande y para vencerlo tendrán que continuar sumando voluntades en el empeño de hacer del polo productivo, enclavado en la Paquito Rosales lo que hoy necesitan los cubanos.