
Julio Erós Nieto, productor y jefe de la subestación de control fitosanitario de Buey Arriba, nunca imaginó que desandaría la populosa Habana y no precisamente a causa de un ascenso profesional, sino tras una planta milenaria, oriunda de Paraguay, introducida en Cuba por el Comandante en Jefe Fidel Castro: la stevia.
VIAJE A LA SEMILLA
De oídas primero y luego por internet, supo de sus propiedades como sustituta de la sacarosa y lo favorable para los diabéticos al no concentrar el azúcar en sangre, razón suficiente para desafiar aquellos 781,5 kilómetros de distancia.
El sueño fue sumando adeptos, a tal punto que sembraron unas 10 mil plantas de stevia en un cuarto de hectárea, y alistaron un vivero con unas dos mil plantas para asegurar la propagación en ese municipio intramontano, con apoyo del Gobierno, del Partido, los comunitarios y los estudiantes y maestros de la Escuela primaria Ariel Hidalgo Rivero.
“Julio costeó el viaje para traerlas al campo. Fueron unas planticas muy sufridas, pero asimilaron el cambio. Se murieron muy pocas”, refiere la enfermera Eglis López Medina, involucrada en el proyecto desde la primera alborada.
Las macetas se montaron en cajas plásticas y se trasladaron en la yunta de bueyes hasta el campo. Los hombres abrieron los huecos en el terreno, los niños echaron la materia orgánica y las mujeres, con la delicadeza que exigía aquel endeble tallo, ejecutaron la siembra.
SOÑAR EN GRANDE
El Doctor en Ciencias Luis Alberto Sancesario Pérez dio cuerpo a aquella idea, que por primera vez aunó en un Taller nacional, del 12 al 15 de este mes, en Bayamo, a especialistas de diferentes universidades y áreas del conocimiento procedentes de Holguín, Las Tunas, Ciego de Ávila, La Habana, Mayabeque, Artemisa, Matanzas, Villa Clara, Pinar del Río y Granma, además, coordinadores del Proyecto Fortalecimiento de las capacidades municipales para el desarrollo local (Prodel).

Prodel tiene participación en 27 municipios de Cuba, dos de estos ubicados en la provincia: Bartolomé Masó y Buey Arriba. En este último territorio ha financiado seis proyectos de desarrollo local, entre ellos, minindustrias de materiales de la construcción y de procesamiento de frutas y vegetales; el más reciente, lo constituirá una minindustria para la extracción de edulcorantes a partir de la stevia rebaudiana.
El proyecto es financiado por la Agencia suiza para el desarrollo y la cooperación (Cosude) y la Asamblea municipal de Buey Arriba en el marco del proyecto Prodel-FASE III.
Un encadenamiento con la Empresa laboratorio de medicamentos líquidos (Medilip), añadirá mayor valor al pro[1]ducto al emplear estos extractos en la elaboración de productos naturales y genéricos; en tanto, la Industria Alimentaria de Buey Arriba incorpora, de forma experimental, edulcorantes de stevia a mermeladas de guayaba, refrescos concentrados y melados.
NECESARIA SOCIALIZACIÓN
El taller, un hervidero de saberes, aglutinó experiencias en diferentes áreas del conocimiento. Por ejemplo, Juan Carlos Tarrau Sánchez, especialista del Centro de desarrollo local y comunitario del Citma, corroboró con estudios la adaptabilidad de esta planta a las condiciones agroclimáticas de Cuba, su potencial desarrollo por esqueje y la importancia de no someterla a estrés hídrico.
La stevia tiene un ciclo productivo de cinco años. El tiempo que transcurre desde la siembra hasta la cosecha es de tres meses; el primer corte puede hacerse a los cuatro meses y posteriormente cada tres. Su rendimiento es de 1.2 toneladas de hojas secas por hectárea.
Maritza Escalona Morgado, Doctora en Ciencias e investigadora del Centro de Bioplantas de la Universidad de Ciego de Ávila, con un trabajo en la stevia desde el 2014, capacitará al personal de Granma en cuanto al protocolo para la micropropagación de forma acelerada y su manejo agrotécnico.
También constituyó saber compartido la validación de una tecnología para la obtención de extractos empleada en la producción de alimentos en La Estancia, específicamente en jugos de guayaba, piña y con la Empresa agroindustrial Ceballos, en la comercialización de mango y rodajas de piña.
Mirela Santiuste Blen, especialista en Medicina General Integral y en Medicina natural tradicional, del municipio de Artemisa, dio fe en un pequeño grupo de pacientes con diabetes mellitus tipo 2, de la utilización de la stevia y su impacto en el control de la glucemia, a partir del consumo de infusiones. Argumenta, además, que la planta tiene propiedades antibacteriana, hipotensora, antibiótica, cicatrizante, eleva el sistema inmunológico y tiene complementos de vitamina A y C.
El tecnólogo Reynerio Rodríguez Zamora, perteneciente a Medilip, expuso muestras de productos a partir del proyecto Té, y el cultivo en el territorio granmense de moringa, morera, caña santa, tilo, manzanilla y morera edulcorada con stevia.
Yolennis Rodríguez Paneque, subdelegada de Ciencia Tecnología e Innovación, habló del necesario acompañamiento de la gestión de gobierno basado en ciencia, del papel dinamizador que tiene cada experto en el enriquecimiento de este proyecto del cual todos son protagonistas y cuyos saberes urge dinamizar, a partir de que es un plan que supera el conocimiento de la provincia y por el impacto que podría tener en la población, con alza en la diabetes.

PROYECCIONES
Las acciones están dirigidas a fortalecer la cadena de valor asociada a la producción de la stevia rebaudiana y sus derivados, optimizar el proceso de extracción por ultrasonido, para que sea más eficiente energéticamente y en la calidad del extracto; hacer estudios de adaptabilidad, rendimiento y de la actividad antibacteriana, antifúngica y antioxidante de las diferentes partes de la planta; obtención de nuevos productos a partir de los residuales; estudio de los aceites esenciales, desarrollo de líneas de helados y de formulaciones para dulces, mermeladas, refrescos y conservas, jarabes e infusiones, entre otras.
Dentro de toda esta amalgama de retos, es importante el papel de la Agricultura en pro de hacer sostenibles estas materias primas para responder a la demanda industrial, de cara a un proyecto innovador en Cuba, y fundamentalmente en esta zona oriental, donde no existía este tipo de cultivo.
La stevia está en Buey Arriba. Allí reverdece y se propaga junto a las aspiraciones de sus pobladores. El dulzor de sus hojas atrae cual hormigas laboriosas a niños, jóvenes, adultos y, más recientemente, a la comunidad científica cubana que aúna experiencias para extraer del cultivo aquello que pueda endulzarnos el paladar sin poner en riesgo la vida.
Hola saludos cordiales bendiciones como puedo obtener semillas de La Estevia
Hola, cómo puedo conseguir semillas o esquejes de stevia, ya que soy diabetico y me gustaría experimentar con este tema
Saludos y bendiciones
Hola hermano, me gustaría saber si has conseguido la stevia
Bendiciones