Brasilia.-(PL) En un gesto cargado de simbolismo político y afecto personal, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, visitó hoy en Buenos a Aires a la exmandataria argentina Cristina Fernández, en un abrazo fuera de agenda oficial.

Tal encuentro fue revelado por el propio mandatario a través de su red social X, en el que compartió palabras emotivas sobre el vínculo que los une.

«Me alegró mucho volver a verla y encontrarla tan bien, tan fuerte y con ganas de luchar», escribió Lula, quien destacó la dimensión humana del reencuentro.

Rasgueó que su «amistad con Cristina es de larga data y va mucho más allá de la relación institucional. Es el cariño y el amor de amigos, colegas en el ámbito político y en los ideales de justicia social y lucha contra la desigualdad», apuntó.

El gobernante brasileño, quien participó en la capital argentina en la 66 cumbre del Mercado Común del Sur, expresó su solidaridad con Fernández por las dificultades judiciales y políticas que ha enfrentado en los últimos años, calificando su resistencia de muestra de determinación.

«Le deseé toda la fuerza para seguir luchando con la misma determinación que ha caracterizado su trayectoria vital y política», señaló.

También se refirió al respaldo que percibió hacia la política argentina en las calles, señalando la importancia del reconocimiento popular en tiempos de adversidad.

«Pude sentir el apoyo popular que ha recibido en las calles y sé lo importante que es este reconocimiento en los momentos más difíciles», concluyó, enviándole un mensaje de aliento: «Que estés bien y continúes tu lucha por la justicia».

El encuentro refuerza la alianza simbólica entre dos referentes de la izquierda latinoamericana y ocurre en un contexto de fuerte polarización política tanto en Argentina como en Brasil.

Lejos de tratarse de una simple reunión de cortesía, el gesto de Lula representa una reafirmación de los vínculos históricos entre el progresismo del Cono Sur, en un momento en que ambos líderes enfrentan desafíos diversos, pero convergentes.

Aunque el contenido específico de la conversación no fue revelado, fuentes cercanas señalaron que los dos manifestaron preocupación por el retroceso de políticas sociales y la criminalización de liderazgos progresistas en la región.

De igual manera habrían abordado el rol de los organismos judiciales en la disputa política, un tema que toca de cerca la experiencia de ambos.

Fernández, quien fue vicepresidenta hasta diciembre de 2023, permanece como una figura central del peronismo, pese a no ocupar actualmente cargos públicos.

La foto con el presidente brasileño aparece como un gesto de respaldo internacional y una señal de que la exjefa del Ejecutivo sigue siendo una referencia estratégica dentro y fuera de Argentina.